La Sanidad Pública en España se enfrenta a múltiples retos, pero sigue siendo uno de los sistemas más valorados internacionalmente. Para quienes lo experimentan por primera vez, el contraste con otros modelos sanitarios puede ser revelador. Así lo ha explicado la cuenta de X@RCPdesdemicole, que recientemente compartió las impresiones de un residente extranjero tras su rotación por el sistema español de emergencias. Sus palabras destacan tanto la calidad del sistema como las oportunidades de mejora.
En concreto, lo que más llamó la atención del residente fue el volumen de llamadas gestionadas y la rapidez de las respuestas. "¡Más de 500 en una mañana! Claro, porque saben que al otro lado hay respuesta. En mi país, ni hay suficientes teleoperadores y sanitarios ni hay ambulancias para enviar", relató.
"Las ambulancias, cuando están libres, la mayoría de veces llegan en menos de 10 minutos en la ciudad, y en menos de 20 minutos a las zonas rurales"
En este último caso, el funcionamiento de las ambulancias en España también impresionó al visitante. “Aquí, cuando están libres, la mayoría de veces llegan en menos de 10 minutos en la ciudad, y en menos de 20 minutos a las zonas rurales. En mi país, lo normal es que tarden una hora de media”.
Asimismo, destacó el nivel de los equipos que componen las ambulancias. “¡Y aquí hay UVIS móviles con médico y enfermero! Y salen los equipos de Primaria a los avisos en las ambulancias o en los taxis. En mi país el sistema es paramédico, gestionado por bomberos y voluntarios. No tienen la formación de los TES (técnicos de emergencias sanitarias) ni de los equipos médicos”.
LA INFRAESTRUCTURA SANITARIA TAMBIÉN PRESENTA DIFERENCIAS
El residente también mencionó las diferencias en el nivel hospitalario. “En España tenéis todo tipo de material y medicación allí mismo, y hospitales de alto nivel. En mi país, hay hospitales que no tienen para hacer analíticas. Te dicen lo que necesitarían, sacan sangre al paciente y un familiar tiene que llevarla a un laboratorio independiente, si se lo puede pagar”. Los tratamientos y cirugías también representan un choque cultural. “Operaciones o tratamientos de cáncer llevan a la ruina a los que no tienen dinero. Aquí lo pagáis con los impuestos, pero en mi país tienes que pagarlo al momento”.
"En España tenéis todo tipo de material y medicación allí mismo, y hospitales de alto nivel"
Pese a todo, el residente extranjero detectó algunos problemas y actitudes en el sistema español que le sorprendieron negativamente, especialmente entre los usuarios. “Ver cómo piden aquí ambulancias para cosas que se podrían trasladar por sus medios, y encima insultando y exigiendo, me resulta tremendamente chocante”.
El residente concluyó con una advertencia: “no creo que podáis mantener este sistema eternamente. Como no tenéis conciencia de la suerte que tenéis ni de lo mal que se puede llegar a estar en otros sitios, no lo cuidáis. Ni los usuarios, ni los trabajadores, ni los políticos. Espero que aprendáis a cuidarlo mejor”.
El relato de este visitante internacional no solo es un reconocimiento al sistema sanitario español, sino también una llamada de atención. Ante los desafíos actuales, desde la falta de personal hasta los recortes presupuestarios, la perspectiva externa es un recordatorio de la importancia de preservar y fortalecer un modelo que, con sus defectos, sigue marcando la diferencia en la calidad de vida de millones de personas.