El ictus es una de las principales causas de muerte y discapacidad en el mundo. Se trata de una emergencia médica en la que cada minuto cuenta, ya que el cerebro puede sufrir daños irreversibles en cuestión de horas. Es por esto que los médicos deben actuar con rapidez y precisión para minimizar las secuelas y, en muchos casos, salvar vidas. Uno de los avances clave en el tratamiento del ictus es el uso de mapas de tiempo y de volumen, herramientas que permiten a los especialistas determinar qué áreas del cerebro aún pueden recuperarse y cuáles han sufrido un daño irreversible.
En este contexto, el Dr. José Manuel Felices Farias, conocido en Instagram como @doctorfelices, ha compartido en sus redes sociales un vídeo donde explica la importancia de estos mapas en el tratamiento del ictus. “En un infarto cerebral son cruciales los mapas de tiempo y de volumen para saber si tu cerebro tiene zonas afectadas y si podemos salvarlo”, señala el especialista.
“En un infarto cerebral son cruciales los mapas de tiempo y de volumen para saber si tu cerebro tiene zonas afectadas y si podemos salvarlo”
¿CÓMO SE ANALIZA UN ICTUS?
Cuando una persona sufre un ictus, los médicos utilizan dos tipos de mapas cerebrales para evaluar la gravedad de la situación:
- Mapa de tiempo. Indica cuánto tarda la sangre en llegar a las distintas áreas del cerebro. “Las zonas azules o verdes significan que la sangre tarda poco en llegar, mientras que las zonas rojas indican que la sangre tarda demasiado”, explica el Dr. Felices.
- Mapa de volumen. Muestra qué partes del cerebro reciben sangre y cuáles no. “Las zonas azules representan áreas donde la sangre no llega, mientras que las verdes o rojas indican que hay un buen flujo sanguíneo”.
El cruce de esta información es crucial para determinar el pronóstico del paciente. Si en ambos mapas una misma zona aparece afectada, significa que el daño es irreversible. “Ese cerebro está muerto, no tenemos manera de salvarlo”, indica el especialista.
Sin embargo, si hay una discrepancia entre los mapas, existe una posibilidad de recuperación. “Si en el mapa de tiempo vemos que la sangre tarda mucho en llegar, pero en el de volumen comprobamos que aún está llegando, se llama ‘mismatch’. Esto significa que, aunque la autopista principal está bloqueada, las carreteras secundarias todavía funcionan. La zona está en riesgo, pero aún podemos salvarla”.
CATETERISMO CEREBRAL, LA CLAVE PARA DESBLOQUEAR ARTERIAS
Cuando los médicos identifican una zona del cerebro en riesgo pero recuperable, es fundamental actuar con rapidez para restablecer el flujo sanguíneo. Para ello, los radiólogos intervencionistas realizan un cateterismo cerebral, una técnica mínimamente invasiva que permite acceder directamente a la arteria bloqueada.
“Los radiólogos realizamos un cateterismo llegando a la arteria del cerebro que tiene el trombo para aspirarlo y extraerlo”, explica el Dr. Felices. Gracias a esta técnica, se consigue restaurar la circulación y evitar que el tejido cerebral muera por falta de oxígeno.
“Los radiólogos realizamos un cateterismo llegando a la arteria del cerebro que tiene el trombo para aspirarlo y extraerlo”
LA IMPORTANCIA DEL TIEMPO EN EL ICTUS
El ictus es una de las urgencias médicas más críticas, y su tratamiento depende en gran medida de la rapidez con la que se detecta y atiende. De ahí la importancia del Código Ictus, un protocolo de actuación rápida que moviliza a los equipos médicos para intervenir lo antes posible.
En este sentido, conocer los síntomas de un ictus y acudir de inmediato a urgencias puede marcar la diferencia entre la recuperación y una discapacidad severa. Los signos de alerta incluyen dificultad para hablar, debilidad en un lado del cuerpo y pérdida repentina de visión o equilibrio. Ante cualquiera de estos síntomas, el tiempo es oro. Como señala el Dr. Felices: “si actuamos rápido, estamos a tiempo de recuperar ese cerebro”.