Una biomédica, Lidia (@Bio_Lidia), publicaba un hilo a través de X donde relataba una conversación que mantuvo con el conductor de su taxi.
Lidia explicaba que tras la cena de Navidad de su laboratorio, decidió tomar un taxi para volver a casa. Fue entonces, cuando el joven taxista que conducía el coche le pregunta a Lidia a qué se dedica. Ella daba respuesta a su pregunta “Soy investigadora biomédica en cáncer”.
El joven con mucha educación, tal y como Lidia añade, confeso que esa “un poco conspiranocio” mientras justificaba que había leído noticias sobre la cura del cáncer donde se confirmaba que era algo de conocer general. Pero, que “se habían cargado” a los investigadores que lo habían descubierto.
DEMONTA EL MITO: "LA CURA PARA EL CÁNCER YA EXISTE"
La investigadora le explico al joven por qué eso no era cierto. Ella misma aclara que el cáncer no es una única enfermedad, pues se trata de un conjunto de muchas diferentes. Incluso cada tipo de cáncer tenía diferentes comportamientos entre los pacientes, “precisamente porque ninguno somos iguales” ejemplifica Lidia. Un hecho que explica la dificultad -o imposibilidad- para encontrar un tratamiento o fármaco eficaz que erradique esta enfermedad.
Además, ella le explicaba al joven el significativo avance que se ha conseguido en las últimas décadas. Pues, no solo el porcentaje de curación ha incrementado, sino que la calidad de vida de los pacientes ha mejorado notablemente. Incluso se ha conseguido cronificar algunas tipologías de cáncer.
FIN DEL TRAYECTO
La investigadora finalizaba el hilo contando que, una vez llegados a su destino, el joven le agradeció la explicación. Así, Lidia comenta como esta anécdota también es parte de la comunicación científica y de la labor de los investigadores. “Y, si he conseguido que una persona se replantee cosas, yo feliz”, concluía la científica.