Salud Castilla y León ha publicado en X (antes Twitter) una infografía con las intolerancias más comunes en la población. La leche, el gluten, la fructosa, los huevos y el pescado son los ingredientes más comunes entre las alergias de la población. Además, la intolerancia a cualquier alimento que contenga alguna de estas sustancias pueden generar síntomas comunes que pueden confundirse con otras patologías.
@Salud_JCYL destaca los dolores de cabeza o de estómago. Esta dolencia es una de las más frecuentes y puede confundirse con otras patologías de tipo vírico, por lo que será indispensable observar el resto de síntomas para saber qué está ocurriendo en nuestro organismo.
Desde la cuenta oficial de Salud de la Comunidad también destacan la obesidad o el sobrepeso, la sensación de fatiga e incluso los problemas dermatológicos. Estos últimos se pueden manifestar de cualquier forma: desde acné hasta psoriasis. A estos síntomas se puede añadir la inflamación de algunas articulaciones, que también provoca dolor en las extremidades.
Es fundamental conocer las intolerancias y leer el etiquetado de los productos
Las intolerancias alimentarias son más difíciles de caracterizar porque pueden estar causadas por componentes alimentarios no proteicos, como la leche. Según explica la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), este producto llega al intestino sin haber sido desdoblada, lo que puede provocar gases, malestar, diarrea y dolor abdominal.
Para evitar estas reacciones a cualquiera de estos alimentos es fundamental conocer las intolerancias y leer el etiquetado de los productos. Además, cocinar primer la comida de una persona con intolerancia o alergia ayudará a evitar la contaminación de su menú. A esta medida se añade también la manipulación de los utensilios de cocina con cuidado y la limpieza de todas las superficies.
PREVALENCIA EN ESPAÑA
La alergia alimentaria se sitúa como una de las más frecuentes con más de 17 millones de europeos afectados, siendo dos millones en España, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC). Entre el 1 y el 3% de la población de adultos sufre alguna alergia o intolerancia alimentaria, según los datos de la AESAN. Si hablamos de niños, en torno al 6% padece alguna de estas afecciones. Estas respuestas hipersensibles pueden manifestarse de diversas maneras y pueden categorizarse como alergias e intolerancias alimentarias.
Estos datos reflejan la incidencia, cada vez mayor, de alergias alimentarias en la población española. Ante una posible intolerancia es fundamental identificar los principales síntomas para descartar conocer a tiempo qué está ocurriendo en nuestro cuerpo. Los síntomas menos graves incluyen dolores o reacciones físicas. Sin embargo, la sintomatología puede derivar en efectos adversos que perjudiquen gravemente la salud.