Cada vez más, los médicos alzan la voz para quejarse de la excesiva burocratización de sus tareas. Y es que, más allá del fonendoscopio o de cualquier otro instrumento necesario para la asistencia clínica, a veces parece que su principal herramienta de trabajo sea el ordenador. Esto puede parecer una exageración, pero no lo es, de hecho, el 44% de su jornada lo dedican a introducir datos en el ordenador.
Así lo refleja un informe publicado en el American Journal of Emergency Medicine, y que, compartido en X por @AntelmPujol, residente de cuarto año de Endocrinología y Nutrición, hace un análisis de la productividad de los registros electrónicos en la comunidad hospitalaria. Como dato relevante, este apunta, en su titular, cómo los médicos realizan 4.000 clics de ratón durante un turno de 10 horas.
En su interior, señala cómo dividen el resto de su jornada, dedicando la segunda mayor parte del tiempo -el 28%- a la “atención directa al paciente”. El 12% lo dedican a la revisión de resultados de pruebas, y el 12% a la “discusión con colegas”. Por último, el 3% restante va derivado a “otras actividades”. Se trata de un informe que, a pesar de datar del año 2013 y estar centrado en los médicos de urgencias, ha recibido la aprobación de multitud de facultativos de otros servicios a través de la citada publicación de X.
“¿Dónde está el porcentaje de tiempo que se usa peleando con la impresora y consiguiendo hojas?”
De hecho, bromea un usuario de esta red social, los que pueden utilizar el ordenador deben considerarse afortunados, ya que “en la mayoría de las instituciones de salud todavía se escribe con máquina de escribir”. “¿Cuándo hablas de clics en el ratón hablas de palabras escritas a mano?”, le apoya @Lushersk, residente de Traumatología. “Confirmo” o “Triste realidad” son otras de las respuestas que ha recibido el futuro especialista.
“¿Dónde está el porcentaje de tiempo que se usa peleando con la impresora y consiguiendo hojas?”, se pregunta también @dramuajaja. Muchos de los comentarios son de usuarios de Latinoamérica, lo que confirma que esta problemática no es exclusiva de España. Por ejemplo, Franco Bruna Romagnoli se hace eco de una de las demandas históricas de los facultativos de nuestro país, que es el poco tiempo que les queda para estudiar o aprender cosas nuevas.
Y es que, como se comentaba al comienzo del artículo, cada vez son más los que se quejan de tener que hacer tareas banales y que, sin embargo, les quita una cantidad ingente de tiempo. De hecho, el informe concluye que “una mayor eficiencia en la introducción de datos permitiría a los médicos de urgencias dedicar más tiempo a la atención de los pacientes”. “Sinceramente, para analizarlo. Yo siempre he creído que se dedica MUCHO tiempo a la estética de la historia que podría dedicarse al paciente y a la familia”, escribe en X Leonardo Ramírez, cardiólogo venezolano.
LA AUTOBAJA, RETO A ALCANZAR EN EL FUTURO
En España, muchas asociaciones de médicos llevan años reclamando nuevos sistemas de justificación de bajas para los cuadros leves de determinadas enfermedades, tales como migrañas, gastroenteritis, catarros o gripes estacionales. Con ello, aseguran, tendrían más tiempo que dedicar a los pacientes durante esa jornada laboral que analiza el informe de la American Journal of Emergency Medicine.
“Se fuerzan unas consultas para hacer solamente burocracia, porque la mitad de los pacientes vienen tratados de casa al ser enfermedades que ya conocen”
“Se fuerzan unas consultas para hacer solamente burocracia, porque la mitad de los pacientes vienen tratados de casa al ser enfermedades que ya conocen”, aseguró en una entrevista concedida a ConSalud.es la Secretaria de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), Aurora García.
También defiende esta medida, con voces a favor y en contra, el propio Ministerio de Sanidad. "Llevamos tiempo estudiando este tema, y lo hacemos de la mano del resto de agentes implicados", comentó Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad, a través de su perfil de X. “Esto no es ninguna ocurrencia ni el invento de la rueda”, insistió.