El sistema inmunológico protege al cuerpo de agentes externos, como pueden ser bacterias, virus, hongos o toxinas. Esto lo hace produciendo anticuerpos y células que atacan a los microorganismos. En este contexto, la cuenta de TwitterCerebro Digital (@digitalcerebro), enfocada a fomentar el conocimiento digital, ha publicado un vídeo en el que se observa cómo un glóbulo blanco humano persigue a una bacteria hasta atraparla y encapsularla. Gracias al vídeo, tomado a través de un microscopio, los usuarios de la red social pueden apreciar lo “fascinante del sistema inmunológico”.
El vídeo original fue capturado por David Rogers, ingeniero informático. Se tomó a través de un microscopio, y en él se puede observar cómo un glóbulo blanco, componente del sistema inmunológico humano, persigue a una bacteria hasta capturarla y encapsularla. Dicho vídeo, posteriormente, fue republicado por el farmacéutico español Gorka Orive.
El leucocito se encuentra en “plena persecución” de los microorganismos Staphylococcus aureus agregados a la película
En concreto, el metraje proviene de una película de 16mm que se filmó en la década de 1950 en la Universidad de Vanderbilt. En él se aprecia un leucocito polimorfonuclear humano (neutrófilo), en un extendido de sangre. Los leucocitos polimorfonucleares se producen a partir de la célula madre en la médula ósea, lugar en el que se almacenan y se liberan al torrente sanguíneo cuando el organismo los necesita. Estos viven en la sangre en torno a doce horas, y se diferencian de los glóbulos rojos porque poseen núcleo y son de mayor tamaño. Los leucocitos polimorfonucleares se dividen en neutrófilos, eosinófilos y basófilos.
Por su parte, los leucocitos neutrófilos son una de las primeras células inmunitarias que reaccionan cuando microorganismos como bacterias o virus entran al cuerpo. En este sentido, se desplazan hasta el lugar de la infección y eliminan los microorganismos cuando los atrapan. También los pueden eliminar liberando enzimas, que los destruyen.
En el vídeo, el glóbulo blanco se desplaza entre glóbulos rojos, que se identifican gracias a su color oscuro y a su forma redonda. Así, el leucocito se encuentra en “plena persecución” de los microorganismos Staphylococcus aureus agregados a la película. De este modo, el glóbulo blanco va persiguiendo al microbio, ignorando a los glóbulos rojos y las plaquetas. A su paso, va deformando y desplazando los glóbulos rojos que se encuentra.
Se cree que el quimioatrayente (sustancia química que atrae o repele las células) derivado del microbio podría ser el fragmento C5a del complemento. Esto se genera por la interacción de anticuerpos en la corriente sanguínea con la cascada de complemento o péptidos N-formilo bacterianos. Además, también se pueden ver plaquetas de sangre adheridas al vidrio subyacente.
Se cree que el quimioatrayente derivado del microbio podría ser el fragmento C5a del complemento
Los glóbulos blancos son parte del sistema inmunitario del cuerpo, y ayudan a combatir infecciones y enfermedades. Una disminución de los glóbulos blancos, por debajo de los 4.000 por microlitro de sangre, baja las defensas y vuelve a las personas vulnerables ante agentes externos. Las causas de un recuento bajo de glóbulos blancos pueden incluir anemia, quimioterapia, radioterapia, VIH u otras infecciones.
Por el contrario, cuando el recuento de glóbulos blancos es elevado, podría tratarse de una infección, reacción a medicamentos o enfermedades de la médula ósea. Esto refleja que el sistema inmunológico podría estar combatiendo una infección o algún tipo de cáncer.