Hoy da comienzo la primera ola de calor en España este 2024 con avisos por altas temperaturas, tal y como lo ha recordado el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (@CienciaGob) en X, antiguo Twitter. Esta ola de calor vendrá acompañada de calima, una combinación que “puede afectar a nuestra salud”. Ante el riesgo que supone esta emergencia climática para la sociedad, el ministerio ha recordado que dispone de dos herramientas del Instituto de Salud Carlos III(ISCIII) “para hacer estimaciones sobre posibles excesos de mortalidad atribuible a la temperatura”:
Una de ellas es el Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), que “permite estimar el exceso de muertes diarias atribuibles a altas temperaturas”. Esta herramienta “hace estimaciones por CCAA y provincia, por sexo y grupos de edad, y facilita comparativas con otros años”. Y, con todos esos datos, propone medidas preventivas para reducir el impacto del exceso de temperatura sobre la salud de la población.
En concreto, MoMo se sirve de tres fuentes de datos, como son las muertes diarias de los últimos 10 años ofrecidas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Ministerio de la Presidencia (salvo las de 2020 por el impacto de la pandemia), las temperaturas registradas a nivel provincial en AEMET y la población por edad, sexo y provincia, datos también ofrecidos por el INE.
“2024 fue el tercer verano más cálido en lo que va de siglo con 4 olas de calor”
Esta herramienta “calcula una estimación diaria del exceso de mortalidad atribuible al calor utilizando series históricas de mortalidad y temperaturas mediante técnicas estadísticas”, aunque no funciona como registro de defunciones ni tampoco define el número de personas fallecidas. Respecto al último año, en el verano de 2023 MoMo “observó el tercer mayor exceso de mortalidad atribuible a altas temperaturas en lo que va de siglo, tras 2003 y 2022”. Se convirtió así en “el tercer verano más cálido en lo que va de siglo con 4 olas de calor”.
El ISCIII también cuenta con el Índice Kairós, “un sistema que establece avisos sobre diferentes niveles de riesgo de mortalidad asociado a altas temperaturas”. Este proyecto “estima la probabilidad de un incremento del 10% o más de la tasa de mortalidad atribuible al calor” y refiere 3 niveles de alerta por riesgo de mortalidad distintos: bajo, moderado y elevado. Ofrece datos para el día en curso y para los 5 posteriores, tanto por ámbito poblacional (autonómico y provincial) y por grupos de edad.
MoMo yel Índice Kairós forman parte del Observatorio de Salud y Cambio Climático (OSCC)
Además, para medir la calidad del aire y reaccionar ante situaciones de emergencia como estas, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) dispone del Laboratorio de Calidad del Aire de Canarias (AirCanLab), una nueva infraestructura científica que estudia las partículas en suspensión. Su objetivo final no es otro que mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y poder agilizar la respuesta en situaciones de alarma, como en incendios forestales, erupciones volcánicas o episodios de calima.
Por otro lado, los ministerios de Ciencias, de Transición Ecológica y Reto Demográfico y de Sanidad han impulsado el Observatorio de Salud y Cambio Climático (OSCC), un área de trabajo interdisciplinar que estudia cómo proteger a la población trabajadora del impacto de las altas temperaturas y de otros fenómenos metereológicos extremos. Buscan adelantarse con medidas preventivas y el impulso de actuaciones coordinadas para cumplir con esta labor. Tanto MoMo como el Índice Kairós forman parte de este Observatorio.