Si hablamos del tratamiento 'vampiro facial' a todos nos viene a la mente la cara de Kim Kardashian llena de pinchazos y ensangrentada... Este tratamiento, que en Medicina Estética se denomina Plasma rico en plaquetas, aunque muy escandaloso, tiene múltiples beneficios... y no solo para la piel o la belleza.
Almudena Nuño, dermatóloga y especialista en Medicina Estética, nos explica en el podcast de ConSalud, 'La Huella de la Piel', que este tratamiento consiste en "extraer la sangre del paciente y de esa sangre, hacer una serie de procedimientos para extraer la parte enriquecida en plaquetas, porque esa es la parte que estimula la regeneración, y se lo volvemos a poner al paciente".
Pero... ¿para qué sirve este tratamiento? Para la piel "lo utilizamos en rejuvenecimiento, ya que estimula la producción de colágeno, hialurónico o elastina", según detalla la doctora Nuño. Aunque, ojo, porque aunque con un solo tratamiento ya veríamos efectos, "lo ideal es hacerlo constante, una pauta de tratamiento constante".
No obstante, más allá de las cuestiones de estética, el tratamiento de plasma rico en plaquetas "se inventó para regenerar en cavidad oral, en cirugías orales, para la regeneración de la encía y toda la zona; luego lo utilizaron los traumatólogos para tratar lesiones de articulaciones; y, los dermatólogos en Medicina Estética".
Por tanto, en cuestiones de salud, el 'vampiro facial' se usa más allá del rostro, por ejemplo, para la "regeneración de heridas, personas que han sufrido un aaccidente y tienen una herida o personas con úlceras que necesitan que se cierren".
Además, también se ha demostrado su eficacia en la caída de cabello, "en la caída que sufrimos tras el covid o la caída de cabello después de un parto, una cirugía o una situación estresante".
Y por si fueran pocas las opciones, la doctora Nuño señala que las personas que tienen melasma, también pueden utilizarlo para mejorar la calidad y textura de la piel.
Si todavía tienes alguna duda sobre esta técnica, puedes escuchar el podcast completo con Almudena Nuño: