El descanso es parte fundamental de nuestro día. No solo respetar las horas de sueño se convierte en un factor clave, también es importante tener una desconexión mental de la rutina, de los estímulos digitales y de todo aquello que, día a día, pueda generar niveles más altos de estrés o ansiedad. Y no lo decimos nosotros, lo dicen los estudios y lo ratifica el médico @AntelmPujol en sus redes sociales.
Concretamente, el facultativo comparte en redes un estudio, publicado en la revista Springer Link, que realiza “un análisis transversal de la relación entre las prácticas sabáticas y el agotamiento de los docentes estadounidenses, canadienses, indonesios y paraguayos”, como resume el título del artículo.
Esta investigación estudió el descanso y el agotamiento entre 1.300 profesores de Estados Unidos, Canadá, Indonesia y Paraguay
“Nuestro objetivo es llenar este vacío con un estudio cuantitativo sobre la observancia del sábado y el agotamiento entre 1.300 profesores de Estados Unidos, Canadá, Indonesia y Paraguay. Informamos sus concepciones del sábado y cómo esas concepciones informan su práctica docente”, apuntan los investigadores.
El equipo científico utilizó el sábado como día de descanso para los profesionales dedicados al ámbito de la salud. “Encontramos una relación inversa y estadísticamente significativa entre la observancia del sábado y el agotamiento que es sólida en varias especificaciones del modelo, lo que sugiere que la observancia del sábado puede ser útil para reducir el agotamiento entre los educadores”, explican.
En concreto, y como indica @AntelmPujol en X, realizar una desconexión absoluta del trabajo o del estudio al menos un día a la semana permite disminuir el estrés, el ‘burnout’ y la ansiedad. “Más no es mejor, mejor es mejor”, dicta el facultativo en su mensaje.
Los profesionales que preservaron el sábado como día de completo descanso presentaron niveles más bajos de agotamiento. “La magnitud de la diferencia es considerable: entre un 40 y un 49% de una desviación estándar menor para los maestros que informan guardar el sábado en comparación con los maestros que informan que no lo guardan”, comenta el equipo científico.
Además, según concluyen los investigadores, estos resultados están demostrados. En concreto hablan de “un nivel de confianza del 99% y sólido ante la inclusión o exclusión de características demográficas, covariables de la experiencia docente y efectos fijos del país”.