María Jiménez ha fallecido a la edad de 73 años en su Triana natal (Sevilla) en la madrugada del jueves, tal y como han informado sus familiares a través de un comunicado. Su muerte se producía a las 1:00horas, rodeada de todos sus seres queridos, quienes todavía no han querido revelar la causa de su fallecimiento. Después de casi 50 años de trayectoria musical, la artista recibirá un último adiós con una capilla ardiente instalada en el Apeadero del Ayuntamiento de Sevilla, después de que sus restos den un paseo póstumo en coche de caballos por el barrio sevillano que la vio crecer, cumpliendo así el último deseo de la cantante, bailaora y actriz.
"Con profunda tristeza y dolor en nuestros corazones, despedimos hoy a María Jiménez, mujer amada y respetada por su compromiso inquebrantable con su familia, amigos, y admiradores. Un espíritu indomable, una personalidad arrolladora, una mujer fuerte y valiente que luchó contra todas las adversidades más allá de lo imaginable", señala su hijo, Alejandro Jiménez, que termina el escrito: “Se nos va la última gran diva, y una nueva estrella pasa a formar parte del firmamento, con un brillo intenso. Sin lugar a dudas será profundamente extrañada, la echaremos mucho de menos, su familia, amigos y admiradores, pero su legado vivirá para siempre".
PROBLEMAS DE SALUD EN SUS ÚLTIMOS AÑOS
La polifacética María Jiménez llevaba 10 años encadenando distintos problemas de salud. A comienzos de 2013 le diagnosticaron un cáncer de mama en su estado inicial, pero que tardó más de 3 años en superar y del que se recuperó completamente en 2017. Además de sufrir problemas respiratorios y circulatorios en sus últimos años de vida, era en 2019 cuando la cantante tenía que ser hospitalizada por una oclusión intestinalque casi le cuesta la vida.
"Un espíritu indomable, una personalidad arrolladora, una mujer fuerte y valiente que luchó contra todas las adversidades"
Durante este cuadro, permaneció ingresada con pronóstico grave que incluso le obligó a permanecer dos meses en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la clínica San Rafael de Cádiz. Jiménez logró salir adelante a pesar de la gravedad, de hecho, ella misma confesaba que sentía que había resucitado. Pero su estado de salud menguó y desde entonces vivía apartada de la agenda pública para dedicarse a sí misma.