En los últimos meses, una de las ‘leyendas’ que más se ha comentado en redes sociales hace referencia a casos de personas que se han despertado durante una operación. Así, historias de pacientes que sentían absolutamente todo durante la intervención quirúrgica pero que no se podían ni mover ni articular palabra han inundado perfiles de Instagram, X (anteriormente Twitter) o Tiktok durante meses. Sin embargo, ¿es posible despertarse en medio de una cirugía? Lo cierto es que sí, es un fenómeno raro conocido como despertar intraoperatorio.
En este contexto, el anestesista y profesor David Callejo Crespo ha compartido, a través de su cuenta en la red social Instagram (@davidcallejo10), en qué consiste esta situación y por qué puede ocurrir. “Son eventos muy traumáticos para los pacientes porque están despiertos, sienten el dolor, escuchan las conversaciones e incluso huelen el quirófano, pero no pueden moverse”, comenta en la descripción del vídeo.
El influencer comenta que uno de los mayores miedos de la gente es despertarse de una cirugía, algo que es posible y que no solo provoca que te despiertes, sino que puedes estar paralizado por completo y no poder hacer nada. “Para hacer una anestesia general usamos tres fármacos. Un fármaco para dormirte, el propofol, que es con lo que murió Michael Jackson, un fármaco para que no te duela, el fentanilo, y un tercer fármaco para que no te muevas, el rocuronio”.
"Son eventos muy traumáticos para los pacientes porque están despiertos, sienten el dolor, escuchan las conversaciones e incluso huelen el quirófano"
En concreto, el fármaco peligroso es el rocuronio, porque es un paralizante. “Una vez que te lo ponen no puedes mover ni un solo músculo”. El problema radica en que, a veces, se deja de administrar el fármaco que duerme por fallos del anestesista, pero se sigue administrando el fármaco relajante muscular. “Lo que te va a pasar es que te vas a despertar en medio de la cirugía, vas a sentir todo lo que te hacen, estás completamente despierto. Sentirás el sabor del tubo en la boca, vas a oler a quemado, vas a oír las conversaciones de quirófano pero no te puedes quejar ni hacer absolutamente nada”.
El despertar intraoperatorio es una de las complicaciones más graves de la anestesia, “pero por suerte con los medios que tenemos ahora mismo es prácticamente imposible que pase”. El anestesista explica que, para evitarlo, se coloca una pegatina en la frente de los pacientes que muestra lo dormidos que están y avisaría si el paciente se despertase. “Asique tranquilidad, que nadie se asuste”.
CASOS EN EL MUNDO
Hace unos años, un paciente demandó a la clínica donde se realizó una rinoplastia, a la cirujana de la misma y al anestesista por un despertar intraoperatorio. Sin embargo, este no es un caso aislado: según un estudio realizado con pacientes de Reino Unido e Irlanda, aproximadamente uno de cada 19.600 pacientes se despierta durante una cirugía. Otros estudios en Estados Unidos reportaron tasas más altas: uno de cada 1.000 pacientes quirúrgicos.
Los pacientes suelen describir una amplia gama de sensaciones, entre las que se encuentran la asfixia, parálisis, dolor, alucinaciones y experiencias cercanas a la muerte
Los pacientes suelen describir una amplia gama de sensaciones, entre las que se encuentran la asfixia, parálisis, dolor, alucinaciones y experiencias cercanas a la muerte, según la CNN. Pese a que la mayoría de los episodios duraron poco tiempo, pues el 75% de ellos duraron menos de cinco minutos, casi la mitad de todos los pacientes que se encontraban conscientes durante la cirugía sufrieron consecuencias psicológicas a largo plazo, como trastorno de estrés postraumático y depresión.
RIESGOS EN FUNCIÓN DEL TIPO DE CIRUGÍA
Según explica un artículo de la CNN, existen operaciones que presentan un mayor riesgo de que esto pase. Ejemplo de ello son las cesáreas de emergencia, que requieren dosis menores de anestésico para evitar dañar al bebé. Además, también se requiere de dosis más bajas durante las cirugías cardiacas y las cirugías de trauma de emergencia, pues grandes dosis podrían llevar al extremo a pacientes vulnerables.