La pandemia provocada por el SARS-CoV-2, junto con otros brotes y epidemias recientes a los que la humanidad ha tenido que hacer frente, han puesto de relieve la importancia de un intercambio amplio y rápido de patógenos con el objetivo de poder realizar no solo una vigilancia eficaz de los mismos, sino también posibilitar el desarrollo oportuno de terapias y vacunas, así como para el desarrollo de planes de respuesta.
En la actualidad, gran parte del intercambio de patógenos se realiza de forma bilateral. Un sistema ineficiente que supone un riesgo para los países que se quedan fuera y que, además, puede traducirse en una vigilancia insuficiente para patógenos emergentes que puedan llegar a ser una amenaza para la salud pública.
Razón por la que el mundo necesita contar con un sistema para compartir de forma rápida, segura y eficiente materiales biológicos con potencial epidémico o pandémico, y la experiencia para realizar evaluaciones de riesgo exhaustivas que puedan compartirse de rápidamente con todos los países. De esta forma se podrían desarrollar planes de respuesta que puedan compartirse equitativamente con todos los países que lo necesiten.
"El Sistema BioHub de la OMS ofrecerá un mecanismo confiable, seguro y transparente para que los Estados miembros de la OMS compartan voluntariamente nuevos materiales biológicos, sin reemplazar o competir con los sistemas existentes"
Este es el punto de partida del Sistema BioHub de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Una iniciativa que sigue un enfoque por etapas y que en 2021 lanzó una primera fase piloto. Estaba se centró en intercambiar variantes del SARS-CoV-2 como forma de probar una base a través de la que garantizar una base operativa y comenzar a desarrollar un sistema justo y equitativo para compartir los beneficios que pueden surgir del intercambio de materiales biológicos con potencial epidémico o pandémico. Desde entonces la OMS organiza periódicamente sesiones informativas para los Estados miembros, así como sesiones para actores no estatales con el objetivo de recopilar comentarios sobre el progreso y los desarrollos del Sistema BioHub.
Recientemente la OMS ha publicado los criterios y modalidades operativas que deben cumplir los laboratorios que deseen recibir los materiales biológicos como parte de este sistema de intercambio internacional, y garantizar así la máxima seguridad en las operaciones que se realicen. Estas disposiciones se encuentran en consonancia con las recomendaciones del Manual de Bioseguridad en Laboratorios de la OMS.
“El Sistema BioHub de la OMS ofrecerá un mecanismo confiable, seguro y transparente para que los Estados miembros de la OMS compartan voluntariamente nuevos materiales biológicos, sin reemplazar o competir con los sistemas existentes. El intercambio de materiales biológicos con potencial epidémico o pandémico se realizará a través de uno (o más) de los laboratorios designados como instalación BioHub de la OMS”, expone.
Tras los resultados obtenidos en el programa piloto, BioHub se expandirá del SARS-CoV-2 a otros patógenos conectando a los socios con otros repositorios y redes de laboratorio a lo largo del 2022.