¿Cómo aprovechar la propia tecnología para optimizar, valga la redundancia, los procesos de fabricación de tecnología sanitaria? Con el objetivo de ofrecer respuestas a estas preguntas, la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, Fenin, ha reunido en sus sedes en Madrid y Barcelona a diferentes socios junto con tres expertos tecnólogos. Unos encuentros que han permitido conocer las inquietudes que les surgen a estas compañías y tratar de saber si sus fábricas pueden tener una optimización en diferentes procesos a través de las nuevas tecnologías.
Pilar Navarro, directora de Innovación de Fenin, enumeró en estas jornadas algunos ejemplos, como “la aplicación de la inteligencia artificial, que puede impactar positivamente en el proceso productivo, y los gemelos digitales, ejemplo de duplicación de línea para poder testar procesos de rendimiento productivo”.
"Los tecnólogos conocen el contexto en el que se mueve nuestra industria y consiguen derivar un asunto que, a priori, puede parecer muy teórico a un plano muy práctico"
La jornada contó con la participación de Jordi Palmiola Creus, Project manager del Departamento de Proyectos Singulares y responsable del 4.0 de EURECAT, Hugo Martínez de Lahidalga, strategic business development de TECNALIA, e Ivan Arriola, technology transfer manager de TEKNIKER. Desde sus respectivos puntos de vista, estos expertos plantearon a las empresas una serie de ideas para mejorar tanto su producción, su rendimiento o su posible expansión en otros mercados.
“Los tecnólogos conocen el contexto en el que se mueve nuestra industria y consiguen derivar un asunto que, a priori, puede parecer muy teórico a un plano muy práctico. En definitiva, conocer cuáles son los retos que se presentan en los procesos de fabricación de tecnología sanitaria en nuestra industria y buscar las soluciones más efectivas, que puedan derivar en acuerdos basados en la competitividad empresarial”, explicó Navarro en referencia al objetivo de estos encuentros.
En concreto, la directora de innovación de Fenin apunta que estas reuniones sirven para detectar cuáles son las tecnologías que más deben tener en cuenta las compañías en el diseño de la “fábrica del futuro, para poner en valor las tecnologías que se están implementando en estos procesos y si son de utilidad en el ámbito en el que se está operando”, aclara Navarro.
AUMENTO DE PRODUCCIÓN, PAGO POR USO Y EL USO DEL DATO
Entrando más en materia, durante el encuentro entre los socios y los expertos se abordó el aumento de producción de MarsiBionics, una de las compañías presentes. Iñaki Aguirre y Alberto Plaza, director técnico y director de I+D, expusieron su intención de aumentar el número de exoesqueletos pediátricos que producen en un año y pasar de 30 a 500, y planteaban a los tres tecnólogos que consejos les podrían dar para poder dar este significativo salto.
Con el primer reto sobre la mesa, llegaba el momento de plantear qué iniciativas prácticas podrían facilitar ese significativo salto cuantitativo en la producción. El panel de expertos coincidió en las ventajas de aplicar la impresión 3D, una tecnología puntera que, en este caso, aportaría muchas ventajas. Entre las que se encuentra la capacidad de personalización y adaptabilidad a los pacientes que utilizan sus productos; la rapidez que ofrece la impresión 3D frente a otros tipos de producción; la reducción de costes; y la adaptación a la escalabilidad que planteaban desde esta empresa.
En esta misma línea, otra de las compañías socias presentes en el encuentro (Ondatrón) planteó posibles inconvenientes a la hora de aplicar la escalabilidad. ¿Los motivos? Esta empresa asistió en una época en la que se alcanzaron grandes cifras de venta de uno de sus productos, las cuales, al no tener la misma obsolescencia, fueron disminuyendo con el paso del tiempo. Ante esta situación, los tecnólogos mencionaron la posibilidad de aplicar el “pago por uso”, un modelo de negocio por el cual el usuario paga por el uso que hacen de un dispositivo en lugar de comprarlo por adelantado.
El panel de expertos coincidió en las ventajas de aplicar la impresión 3D, una tecnología puntera que, en este caso, aportaría muchas ventajas
Esto implica, en la práctica, que en lugar de abonar un precio único por el dispositivo, los usuarios pagan una tarifa periódica (mensual, por hora, etc.) en función de la cantidad de tiempo que lo utilizan. Además, según explicaron los expertos, esta técnica permite que las empresas investiguen en el desarrollo de productos con un uso de vida más largo y así, puedan seguir alquilando sus productos y generar un mayor beneficio.
En esta jornada también se abordó el uso de los datos sanitarios en los procesos de producción de tecnología sanitaria. Sobre este aspecto, todos los asistentes coincidieron en señalar que dicha información es muy valiosa para seguir desarrollando y mejorando los productos, sin embargo, también conlleva una serie de desafíos en materia de privacidad y protección de la información personal.
La directora de Innovación de Fenin recalcó la necesidad de que estos datos “sean anónimos” para que se puedan utilizar y analizar posteriormente sin generar inconvenientes a las propias empresas. Precisamente, en torno al óptimo análisis y aprovechamiento de estos datos, Navarro destacó el papel de una tecnología como la inteligencia artificial, ya que,“aunque las empresas dispongan de toda esa cantidad de datos, sin la IA no se podría dar el uso que permite esta herramienta”.