Profesionales y Trabajadores autónomos han mostrado su preocupación por las consecuencias no sólo para la salud sino también financieras y sociales que puede acarrear la pandemia de coronavirus.
Así lo ha señalado la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) en un comunicado en el que alerta de que este colectivo puede llegar a tener que soportar pérdidas superiores al 24% de sus ganancias.
En caso de verse afectados por el coronavirus, según UPTA, deberán asumir las obligaciones de cuarentena y baja laboral como el resto de la población, pero las consecuencias para su economía serán sustancialmente peores que para el resto de los trabajadores o empresarios.
En especial, los autónomos que tienen establecimientos abiertos al público con personal contratado, durante su baja, no sólo perderán las ventas y los rendimientos económicos, también deberán seguir soportando el mantenimiento de los gastos estructurales, ya que de lo contrario se podría poner en peligro la continuidad de su negocio.
UPTA ha realizado cálculos, sobre un establecimiento medio en el que el titular tenga un trabajador a su cargo y sufra un mes de inactividad. En este supuesto la reducción media de las recaudación estaría en el 8% aproximadamente, pero en lo que se refiere a sus rendimientos netos anuales, esta cantidad podría incrementarse hasta un 25%, al tener que asumir gastos imprescindibles para mantener el negocio en funcionamiento.
UPTA pide que el Estado haga una bonificación del 100% de la cuota de la Seguridad Social desde el inicio de la incapacidad temporal
Este tipo de establecimientos, con unas ventas brutas anuales de 120.000 euros perdería 12.000 euros de ingresos totales. Teniendo en cuenta que los gastos mensuales correspondientes a los costes efectivos de la actividad se elevan a 7.200 euros, y suponiendo éstos el 60% de gastos sobre facturación, las pérdidas generadas en la renta neta al año podrían llegar a 12.000 euros.
Además, hay que añadir las dificultades financieras y de liquidez que el problema puede acarrear y la pérdida de oportunidades comerciales de futuro.
EXIGEN MEDIDAS
Estos datos justifican, aún más, las propuestas que UPTA ha presentado al Gobierno para que se tomen las medidas económicas necesarias para contener las consecuencias financieras y sociales que la actual crisis sanitaria está produciendo sobre el débil colectivo de autónomos y microempresas.
Entre ellas cabe destacar que el Estado haga una bonificación del 100% de la cuota de la Seguridad Social desde el inicio de la incapacidad temporal por contingencias profesionales para los autónomos que se vean afectados por el coronavirus, tanto por la cuarentena preventiva como para los que hubiesen desarrollado la enfermedad mientras dure la incapacidad temporal.
Además, consideran que el cese por actividad se debería aplicar a todos los autónomos que indirectamente estén afectados y como consecuencia haya una reducción de su facturación de al menos un 25% y esta sea considerada causa de fuerza mayor.
Por otra parte consideran necesario establecer de forma urgente, el mecanismo de control y seguimiento de la aplicación del cese de actividad de los trabajadores autónomos, a través de la formalización de la comisión mixta entre el Ministerio de Seguridad Social, Mutuas de accidentes de trabajo, en las que participarán las organizaciones de trabajadores autónomos más representativas.