El cáncer de vejiga es uno de los más frecuentes entre los hombres en países desarrollados, con una incidencia de 22 casos por cada 100.000 habitantes. La prevalencia es muy alta debido, principalmente, a que un 70% de estos tumores suelen ser de tipo no músculo-invasivo, es decir, que afectan a pacientes con una alta esperanza de vida pero que van a presentar múltiples recurrencias.
A menudo estos pacientes son sometidos a múltiples cirugías, tratamientos endovesicales y citoscopias por las recurrencias que padecen, lo que les genera estrés y llega a afectar incluso a su calidad de vida, en el caso de verse sometidos a cirugías mutilantes, alterando su imagen corporal y sus funciones miccional y sexual.
El 70% de estos tumores afectan a pacientes con una alta esperanza de vida
Bajo el título “Cómo evitar y manejar las complicaciones en cistectomía radical: un reto”, GSK ha organizado en Barcelona el primer Webinar Iberic Urology de ámbito internacional sobre cirugía de cáncer de vejiga. La cita ha reunido a 285 asistentes, siendo retransmitida en un total de 21 sedes entre España y Portugal, y ha contado como ponente con el Dr. Palou Redorta, médico con reconocimiento internacional en el ámbito de la Urología, y con el Dr. Rodríguez Faba como moderador.
Así, tal y como ha asegurado el Dr. Palou Redorta, Jefe del Servicio de Urología de la Fundación Puigvert, “este tipo de encuentros facilita la comunicación entre profesionales de forma rápida e interactiva y mejora la difusión del conocimiento, ya que tener a un experto que explique sus trucos, detalles y posibilidades de futuro de esta técnica es un privilegio para la comunidad urológica, además de repercutir en el día a día en cuanto al tratamiento de nuestros pacientes”.
CISTECTOMÍA RADICAL Y LOS PACIENTES
El tema abordado en esta sesión es, sin duda, de especial interés médico-quirúrgico para los profesionales sanitarios, ya que la cistectomía radical es una de las cirugías más complejas en Urología. Este tipo de cirugía consiste en practicar la extracción de la vejiga y próstata junto con los ganglios linfáticos de la pelvis, con el objetivo de intentar curar el tumor vesical infiltrante (que afecta la capa muscular o la próstata) o en casos de tumor vesical no músculo-inifltrante, en los que han fracasado los tratamientos intravesicales (instilaciones de mitomicina o BCG).
“Se trata de una cirugía difícil, ya que implica hacer la exéresis amplia de las estructuras y luego la correspondiente reconstrucción para derivar una salida de la orina adecuadamente (conducto ileal a la piel o neovejiga para orinar por uretra)”, ha comentado el Dr. Palou.
Los expertos catalogan la cirugía como “difícil”
Además, durante el encuentro, se ha puesto de manifiesto que entre un 40 y el 60% de los pacientes sometidos a cistectomía presentan complicaciones, especialmente de tipo intestinal o infeccioso que, aunque la mayoría de ellas no son importantes, algunas pueden llegar a poner en riesgo su vida. “Se debe estar muy alerta en el postoperatorio, ya que es importante detectar las complicaciones de forma rápida para solucionarlas lo antes posible y evitar así repercusiones mayores o la mortalidad”, indica el Dr. Palou Redorta, Jefe del Servicio de Urología de la Fundación Puigvert.
En cuanto a las técnicas para llevar a cabo esta intervención, desde la instauración de las guías europeas sobre tumor vesical, los tratamientos se han homogeneizado en Europa, aunque sí que podemos encontrar distintos procedimientos, diferenciados entre los que facilitan el diagnóstico y los que favorecen el tratamiento (laparoscopia, robótica).