Los fabricantes españoles de productos de protección sanitaria, bajo la Asociación Española de Fabricantes de Mascarillas, Batas y EPIs (OESP), defienden su labor desde que comenzara la pandemia de Covid-19 y abogan por la conservación del tejido empresarial a través de un programa de apoyo a la producción. Las 18 empresas asociacadas a la OESP tienen capacidad para producir más de 160 millones de mascarillas y así asegurar el abastecimiento nacional.
Reivindican la "autosuficiencia a nivel europeo para garantizar el abastecimiento de este tipo de material sanitario"
Desde la OESP informan que estas nuevas compañías, han supuesto la creación de 700 puestos de trabajo directos desde el pasado marzo. Estas empresas podrían verse afectadas por la importación de productos de dudosa calidad, que no se someten a controles exhaustivos.
En esta línea, los miembros de la OESP recuerdan que tienen la licencia de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps), para fabricar mascarillas quirúrgicas. "Este requisito es indispensable para pertenecer a OESP porque de esa manera garantizamos la calidad técnica de los productos fabricados y destacamos su valor frente a otros fabricantes, nacionales e internacionales, que no cuentan con esta certificación", asegura Sánchez y continúa añadiendo que buscan destacar "el papel de las empresas que respetamos las normas, la regularización vigente y las disposiciones legales que garanticen el cumplimiento de las certificaciones según la normativa española y europea".
La asoaciación de fabricantes informa que trabajan "para conseguir unos altos estándares de calidad en relación con las importaciones", así como reivindicar la "autosuficiencia a nivel europeo para garantizar el abastecimiento de este tipo de material sanitario".