El pasado 24 de abril se aprobó en el Parlamento Europeo el acuerdo interinstitucional para el establecimiento del Espacio Europeo de Datos Sanitarios (EEDS), con 445 votos de los eurodiputados a favor, 142 en contra y 39 abstenciones. Una decisión que presenta un antes y después en el sector y que persigue facilitar el intercambio seguro de datos sanitarios entre todos los Estados miembros de la Unión Europea (UE).
Uno de los campos en los que el EEDS tendrá un impacto muy significativo es el de la tecnología sanitaria, ya que, como señala en una entrevista a ConSalud.es Pilar Navarro, directora de Innovación de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN), “poder acceder a una base a nivel europeo con todos los datos lo suficientemente bien estructurados nos permite ir un paso más allá”.
"Si un paciente español tiene un percance de salud, por ejemplo, una fractura, y necesita posteriormente recibir seguimiento médico en otro país, el objetivo es que los profesionales de este país puedan acceder a sus pruebas ya realizadas y no tener que realizar su propia placa"
Desde sus inicios el EEDS tiene claramente definidos sus objetivos, dirigidos al empoderamiento de las personas (al darle el control sobre sus datos sanitarios), a la mejora de la atención sanitaria y al impulso de la investigación a través del fomento de la innovación. Tres puntos claves que, tal y como apunta Navarro, ofrecerán una serie de ventajas tanto para los pacientes, que verán mejorada la atención que reciben, como para los profesionales, que podrán acceder a mucha más información “para llevar a cabo diagnósticos más precisos y tratamientos más personalizados en menos tiempo”, apunta Navarro.
Metas y beneficios que, pueden favorecer al desarrollo de la tecnología sanitaria, asunto que precisamente fue el hilo conductor de la reciente jornada formativa que organizaron desde Fenin ‘El impacto del EEDS en la tecnología sanitaria y la reutilización de los datos como motor de la innovación’. En ella, varios expertos de talla mundial abordaron los retos que supone la implementación de un espacio como este, que, tal y como afirmó durante el evento Philipp Goedecker, Digital Health Senior Manager del Comité de Coordinación Europeo de la Industria TI Radiológica, Electromédica y Sanitaria (COCIR), va a cambiar todos los sistemas y permitir que estos puedan mantener comunicaciones entre ellos.
Durante la jornada, Goedecker se detuvo en la regulación del EEDS, una de las partes fundamentales para su correcto funcionamiento. En su intervención explicó en qué se basa el Reglamento General de Protección de Datos, una normativa europea que regula la forma en que se recopilan, almacenan y utilizan los datos personales de los ciudadanos, y los Medical Device Regulations, que engloban un conjunto de normas establecidas por la UE para garantizar la seguridad, eficacia y calidad de los dispositivos médicos comercializados dentro de su territorio.
Para la directora de Innovación de Fenin la parte normativa de esta iniciativa es “la parte más ardua pero la más relevante. Es decir, qué se debe hacer para acceder a los datos o para la cesión de ellos". Un proceso complejo que Navarro trata de resumir con el ejemplo práctico de que "si un paciente español tiene un percance de salud, por ejemplo, una fractura, y necesita posteriormente recibir seguimiento médico en otro país, el objetivo es que los profesionales de este país puedan acceder a sus pruebas ya realizadas y no tener que realizar su propia placa; eso supone ahorros, evita duplicidades y es sinónimo de sostenibilidad", aclara Navarro.
“Permiten resolver muchas dudas sobre un sistema tan grande y novedoso como es el EEDS”
Otro de los participantes en la jornada fue Guillermo Lazcoz, doctor en IMPACT-Genómica Centro de Investigación Biomédica en Red CIBER (CIBERER-IISFJD), quien, en su caso, quiso abordar el impacto del EEDS en la tecnología sanitaria desde un punto de vista más centrado en la investigación. Un campo en el que cuenta con experiencia de primera mano ya que actualmente participa en varios proyectos que están basados en los análisis de cortes, en la parte del dato y en la parte genómica. En este sentido, señaló que ya es posible empezar a hacer simulaciones lo suficientemente importantes a la hora de hacer investigación, desarrollo, medicina preventiva y proyectiva.
Pilar Navarro destaca que jornadas como la organizada por Fenin generan un grado de satisfacción de los participantes muy alto, ya que “permiten resolver muchas dudas sobre un sistema tan grande y novedoso como es el EEDS”. Asimismo, apunta que de cara al futuro todavía quedan retos por delante como la interoperabilidad, la creación de una base de datos común y su normalización “para que se puedan compartir datos de forma segura y eficiente en todo el sector sanitario”.