El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha confirmado este miércoles su adelanto y ha anunciado que el índice de precios de consumo (IPC) escaló hasta el 9,8% en el mes de marzo, una cifra que supone un récord desde el año 1985. De todas las partidas, la más destacada es la electricidad, que subió un 107,8% en marzo.
Los datos del Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE) exponen que este miércoles la luz se sitúa ligeramente por debajo de la cota de los 230 euros por megavatio hora (MWh). No obstante, a principios de marzo se registró el precio más caro de la historia de España, con 544,98 euros por MWh.
Un hospital terciario, con una amplia variedad de servicios y una asignación notoria de pacientes, tendrá que hacer frente a cuantías mayores
Los centros asistenciales del Sistema Nacional de Salud (SNS) no son ajenos a una realidad que, si bien ha experimentado un fenómeno de escalada en los últimos meses, ha superado todos los registros a raíz de la invasión deUcrania por parte de las Fuerzas Armadas de Rusia.
Los consultores energéticos consultados por ConSalud.es explican que, en líneas generales, la factura de los hospitales se elevará un 30% respecto al mismo periodo del año pasado, con especial incidencia en el mes de marzo. No obstante, precisan, dependerá de las capacidades del centro: un hospital terciario, con una amplia variedad de servicios y una asignación notoria de pacientes, tendrá que hacer frente a cuantías mayores.
PRECIO SIN CERRAR Y EFICIENCIA ENERGÉTICA
En declaraciones a este medio los expertos subrayan que muchos de los centros sanitarios españoles no tiene cerrado el precio de la electricidad. Esta situación impacta, de forma clara, sobre el incremento real del pago en cada factura, derivando en una auténtica crisis de gestión para las áreas financieras de los hospitales.
La consultora recuerda que los centros hospitalarios funcionan las 24 horas del día, siete días por semana, durante los 365 días del año. Los datos no dejan lugar a dudas: el consumo energético hospitalario supone el 3% del global de todo nuestro país.
Los datos no dejan lugar a dudas: el consumo energético hospitalario supone el 3% del global de todo nuestro país
En este punto los expertos resaltan la importancia de apostar por sistemas sostenibles y la eficiencia energética. Para ello, es necesario una adaptación de la climatización, iluminación, ventilación y suministro de agua caliente en todos los bloques hospitalarios que lo precisen.
Como ejemplo, una situación más habitual de lo deseable: dos tercios del calor o el frío generados de forma artificial en un centro hospitalario se pierden por la carencia de un buen aislamiento en paredes y techo de las entidades sanitarias.
Si la Administración sanitaria autonómica, al tener delegadas las competencias, apuesta en firme por esta visión, ahorrará en su factura, cumplirá las normativas europeas de preservación del medio ambiente y, junto a ello, repercutirán en el bienestar de sus pacientes, el eje del SNS.
IMPACTO TAMBIÉN EN LOS PACIENTES
Un editorial de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) en la revista Archivos de Bronconeumología refleja el impacto que también tienen las sucesivas subidas de la luz en los pacientes que deben utilizar terapias respiratorias domiciliarias (TRD). Así, tomando como referencia los precios de una comercializadora eléctrica en julio del 2021, el sobrecoste energético mensual con IVA para un uso de seis horas de terapia con presión positiva en la vía aérea para el tratamiento de la apnea obstructiva de sueño (100 W de potencia) es de 3,4 euros.
Para oxigenoterapia (concentrador hasta 6 l/m de 300W de potencia) entre 15 y 24 h oscila entre 26,70 y los 46,81 euros. Para un cumplimiento de ventilación mecánica domiciliaria (200 W de potencia) de 8-12 h, entre 8,06 y 14,88 euros y, para un ventilador de alta dependencia durante 24 horas, 31,21 euros.