Los sistemas sanitarios de la Unión Europea se dividen en dos tipos. Están por un lado los que siguen en modelo Beveridge también conocidos como Sistemas Nacional de Salud (caso de España) o los que siguen el modelo Bismarck, en este caso se trata de Sistemas de Seguros Sociales.
Mientras que los primeros se financian a través de impuestos, la financiación de los segundos es a través de cuotas obligatorias pagadas por empresarios y trabajadores o a través de impuestos. A pesar de las diferencias que existen entre ambos modelos, también hay similitudes. Una de ellas es la existencia de algunos copagos por parte de los usuarios.
La eliminación del copago farmacéutico en España es una promesa electoral de los principales partidos
Estas diferencias aparecen recogidas en un informe reciente publicado por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. En el documento se comparan los distintos sistemas sanitarios de los 28 países que forman parte de la Unión Europea atendiendo a sus características y a sus indicadores.
Independientemente del modelo por el que se rijan los diferentes países, todos los ciudadanos tienen que hacer frente a algún tipo de copago. De hecho, según los datos del Ministerio de Sanidad actualmente no hay ningún país europeo en el que se haya eliminado en copago de los fármacos con receta.
Aunque España cuenta actualmente con copago farmacéutico, esto no siempre ha sido así. Esta fue una de las medidas que encabezó los recortes en sanidad que se produjeron a raíz de la crisis económica. Desde entonces es raro el partido político que no incluye en su programa electoral la eliminación o revisión de esta medida. Podemos es un ejemplo.
Si finalmente algún partido español cumple con esta promesa España se convertirá en el primer país de la Unión Europea en tener libre de copago todos los servicios asistenciales, es decir, la Atención Primaria, la Atención Especializada Ambulatoria, el Ingreso en hospital, las pruebas de laboratorio, el diagnóstico por imagen y los fármacos con receta.
Únicamente siete de los 28 Estados miembro tienen copagos en los seis aspectos que recoge en el Ministerio de Sanidad. Se trata de Bélgica, Chipre, Croacia, Eslovenia, Francia, Letonia y Suecia.