No todo los titulados en Medicina quieren pasar por la experiencia que supone presentarse al examen MIR. De hecho, la vida laboral ni se acaba ni empieza en esta prueba selectiva. El MIR permite realizar un periodo formativo mediante la residencia en centros sanitarios del Sistema Nacional de Salud (SNS) y que otorga a los facultativos su especialidad médica.
Pero hay vida más allá del examen MIR. Según recoge el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM) en su página web, entre las distintas opciones alternativas se encuentra la docencia o la carrera investigadora, también el ejercicio de la profesión en centros privados.
“Un médico aunque aparentemente parezca que solo puede estar en consulta puede también ejercer su profesión investigando, haciendo una tesis doctoral o trabajando en un laboratorio. La carrera investigadora es toda una opción, tambiém la docencia”, asegura el responsable de las áreas de Residencia y Profesión del CEEM, Pablo Felipe Ruiz Espinoza.
Por ejemplo, si se pretende trabajar en centros médicos relacionados con la salud. En el ámbito privado-empresarial, es posible ejercer de médico de empresa simplemente con el título de Medicina. También, los centros de reconocimientos médicos son una opción al igual que las residencias de ancianos.
INVESTIGACIÓN Y MÁS FORMACIÓN UNIVERSITARIA
Acceder al doctorado es posible desde el mismo momento de la obtención del título de Grado en Medicina. Por lo que se abre un abanico de posibilidades en materia de investigación, ya sea en el ámbito de la Medicina como en otros campos cercanos.
Asismismo, hay quien al terminar el título de Grado se queda con ganas de más formación universitaria. En este caso, hay una amplia oferta de másteres universitarios por toda la geografía española, tanto para formarse en especialidades médicas como la Medicina Estética en ámbitos más concretos como pueden ser la bioética.
OTRAS OPCIONES
“Aunque la principal salida de un médico sean la consulta o el quirófano, no es limitante. Realmente puedes especializarte en el ámbito que quieras, desde la Medicina militar, pasando por la investigación, la Medicina Estética o en puestos más administrativos como facultativos de la Administración General del Estado”, señala Ruiz Espinoza.
Otra opción es el acceso al empleo público presentándose a oposiciones como las del Cuerpo Nacional de Médicos Forenses, los Médicos Titulares del Estado, los médicos inspectores del Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS), las oposiciones del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) o de inspectores de los sistemas de salud de Comunidades Autónomas.
"Aunque la principal salida de un médico sean la consulta o el quirófano, no es limitante. Realmente puedes especializarte en el ámbito que quieras"
Además, el Centro Universitario de la Defensa de Madrid, dependiente de la Universidad de Alcalá (UAH) ofrece la misma formación de Grado en Medicina que los homólogos de Alcalá, con el añadido de la formación técnica, física y científica para, sumado al grado, convertirse en oficiales médicos de las Fuerzas Armadas. Este grado cuenta con tan solo 25 plazas para todo el Estado.
El CEEM también cita, aunque no lo recomienda, el trabajo temporal y estacional. "Aunque está al límite de la legalidad, es cierto que en algunos hospitales públicos contratan egresados sin especialidad para cubrir bajas, particularmente en periodos vacacionales como verano. Sin embargo, no es una opción recomendable por su temporalidad y precariedad y principalmente por la falta de formación y el perjuicio y peligro que esto podría suponer para la población", explica la organización.
Estas son solo algunas de las opciones que tiene encima de la mesa un graduado en Medicina una vez termina la carrera.