Pediatría y Áreas Específicas es una de las muchas especialidades médicas que quieren aprovechar la actualización de su programa docente -cuya última modificación data del año 2006- para ampliar la formación vía MIR (médico interno residente) de cuatro a cinco años. De hecho, la situación ha llegado a tal punto que, señala a ConSalud.es la doctora María del Mar Rodríguez Vázquez del Rey, vicepresidenta de Atención Hospitalaria de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y miembro de la Comisión Nacional de la especialidad, la anterior junta llegó a elaborar dos borradores de programa distintos: uno de cinco años y otro de cuatro.
La razón, comenta la experta, es el déficit de pediatras de Atención Primaria que vive actualmente la sanidad española, que se acrecentaría aún más si durante un año no salen nuevos especialistas que acaban de terminar su residencia porque tienen que hacer un año más. Aún así, matiza, casi todo el mundo dentro de la AEP tiene claro que la formación debería subir a cinco años: “Atención Primaria piensa que eso sería catastrófico, pero yo defiendo que un año sin salir residentes también sería malo para los de hospital. Al final, todas las especialidades que se han ido alargando han sobrevivido”.
Y es que, desde la última actualización del programa, las cosas han cambiado muchísimo en una especialidad tan amplia como la Pediatría, que de hecho es, tras Medicina Familiar y Comunitaria, la que oferta más plazas MIR cada año. Fundamentalmente, apunta, Rodríguez Vázquez del Rey, en lo relativo a las subespecialidades que muchos residentes comienzan a toquetear durante su periodo formativo y que desarrollan cuando son ya adjuntos.
"Los pediatras de Atención Primaria consideran catastrófico que durante un año no salgan nuevos especialistas"
“De hecho, el programa actual contempla que el último año es para que el residente decida en qué área específica se quiere formar, lo cual es muy interesante. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad ve eso como una debilidad, como si fuese de relleno, cuando realmente se hace porque en los tres años anteriores no da a tiempo a coger todo para que cada sepa hacia donde se quiere orientar”, explica la pediatra del Hospital Virgen de las Nieves de Granada. “Todo esto está basado en Europa, que recomienda que la formación sea de cinco años: tres de Pediatría más general y los dos últimos enfocados en la subespecialidad. Si una Medicina Interna de adulto son cinco años, ¿por qué van a ser cuatro la de un niño?”, se pregunta.
También ha cambiado la visión que tienen los residentes acerca de la especialidad. Debido, en parte, a las malas condiciones, llegó un momento en el que cada vez más personas se querían dedicar al ámbito de la atención hospitalaria, si bien informa la experta que actualmente el 70% de los que terminan su formación acaban trabajando en Primaria: “Hay mucha gente que va cumpliendo las edades del hospital y, obligados a hacer guardias, prefieren irse a Primaria”.
A pesar de todo esto, los residentes de Pediatría realmente solo rotan durante tres meses por Atención Primaria, y es por ello que desde la AEP también quieren aumentar dicha rotación dentro de la propia especialidad a seis meses. Pero otro problema añadido es que tampoco abundan los tutores de Pediatría de Atención Primaria, por la misma razón por la que muchos médicos recién especializados prefieren quedarse a trabajar en los hospitales: la carga de trabajo, que les hace “imposible” compatibilizar las tareas de adjunto y de tutor de residentes.
SIN NOVEDADES EN EL FRENTE
La actual Comisión Nacional de la especialidad de Pediatría y Áreas Específicas se pone a disposición del Ministerio para trabajar desde ya en la actualización del programa, con la “seguridad” que ofrece tener dos borradores tan recientes: el primero, de cinco años, es del año 2020, mientras que el segundo, de cuatro, lo presentaron en 2021: “Posiblemente ahora sería más fácil que en el 2006”. “Esto al final es una cuestión de voluntad, y la esperanza es que ha entrado gente nueva. Con que haya alguien que de verdad quiera sacarlo y sea responsable, esto se puede hacer, por supuesto”, confía la representante de la AEP.
"Elaborar un programa docente es una labor que se hace gratis, en el tiempo libre, y todo para que después ni se lo lean"
Por otro lado, lamenta, todavía no saben nada acerca de los plazos. Nadie dentro del Ministerio, lamenta, les ha dicho cuándo tienen pensado actualizar el programa, solo la anterior subdirectora de Ordenación Profesional les comunicó que quieren renovar todos uno a uno, empezando por los más antiguos; es decir, los que todavía datan de 1998: Cirugía Torácica, Anestesiología, Cirugía Cardiovascular, Medicina Nuclear y Medicina Intensiva.
María del Mar Rodríguez tampoco sabe por qué no salieron las dos versiones que tenía preparadas la anterior Comisión Nacional, si fue por presupuesto o por ese problema que supondría el paso a cinco años. “La realidad es que se quedó parado, y si algo hemos aprendido en la Comisión Nacional es el enorme trabajo que supone elaborar un programa docente… imagínate dos. Es una labor que se hace gratis, en el tiempo libre, y todo para que después ni se lo lean”, denuncia la pediatra. “Desconozco dónde está el atasco, la verdad, y, o meten mucha gente a trabajar en que salgan los programas, o no va a ser fácil”, sentencia.