Alicantino y de padre farmacéutico, Juan Vicente Valor, es el número 1 del FIR 2019. Este miércoles se ha enfrentado a una de los momentos más importantes de su vida: la elección de plaza como Farmacéutico Interno Residente en el Ministerio de Sanidad.
El joven farmacéutico, que obtuvo la mejor puntuación en el examen FIR celebrado el pasado 2 de febrero, ha decidido formarse en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid en la especialidad de Farmacia Hospitalaria. Juan Vicente tuvo 2012 aciertos y 13 errores lo que le otorgó una puntuación de 109,2901.
En una fecha tan especial ConSalud.es ha podido entrevistar al número 1 del FIR 2019, Juan Vicente Valor. Estudió el Grado en Farmacia por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y se formó durante estos meses atrás en la Academia GoFIR.
¿Por qué decidió estudiar Farmacia?
Mi padre es farmacéutico, de hecho tiene su propia oficina de farmacia en Torrevieja (Alicante), y digamos que mis familia me convenció para estudiar Farmacia y venir a hacerlo a Madrid. En Bachillerato mis aspiraciones eran otras, toco el clarinete y siempre me gustó mucho la música pero mis padres, aunque me apoyaron, me insistieron en que tuviese otra salida profesional por si lo llegase a necesitar. Yo no escogí Farmacia porque me gustase, ni mucho menos, pero es cierto que cuando te introduces en este mundo y empiezas a ejercer, ves que tus conocimientos son de gran ayuda para las personas.
¿Le acabó gustando entonces?
En mis inicios, tan solo echaba una mano en la oficina de farmacia cogiendo los medicamentos que la gente necesitaba y dándoselos. Ahora, con el paso del tiempo y la formación, ves que hay mucho más trabajo detrás. Resuelves problemas a los pacientes o intentas remediárselos, es en parte gratificante.
Todo esto tiene una preparación previa. ¿Cómo ha llevado el examen FIR?
Me apunté a una academia, en este caso a GoFIR, porque llevan desde 2017 sacando el número 1. Además, por mi expediente académico me han realizado un importante descuento en el curso. La academia es fundamental porque te tienen preparado un plan de estudio enfocado a sacar a adelante un examen que es tipo test, con material para ensañar esas preguntas, con reglas mnemotécnicas y una organización que te permite sacar el máximo rendimiento en las horas que decidas echarle.
Empecé a finales en agosto de 2018 y estuve durante cinco meses preparando el examen FIR con diferentes pruebas periódicas. Sin vacaciones ni nada, estudiaba todos los días y me entregué en cuerpo y alma porque al haber plazas limitadas no tienes garantía de conseguir una.
Está habiendo movilizaciones entre los MIR, EIR o los PIR para demandar un incremento en el número de plazas. ¿Son necesarias más plazas? ¿Cómo valora el nivel de competencia que hay entre los distintos aspirantes para conseguir una de las pocas plazas?
Si nos fijamos en modelos como los implantados en Estados Unidos o países similares hay bastantes más farmacéuticos por hospital porque están integrados en la planta médica. Por ejemplo, farmacéuticos especialistas en Neumología o Psiquiatría, al igual que hay enfermeros que están especializados y trabajan en la planta médica. Aquí en España no, solo hay un servicio de Farmacia Hospitalaria que se encarga de distintas especialidades médicas pero no que no son especialistas en ese ámbito médico concreto.
"España debe fijarse en el modelo de Farmacia Hospitalaria de países como Estados Unidos"
Implantar un modelo así en nuestro país llevaría también a convocar una mayor oferta de plazas. Se han hecho estudios que avalan el papel de los farmacéuticos acerca de cómo evitan problemas con los medicamentos, la seguridad o la eficacia de los fármacos. Hay que apostar por este tipo de perfiles porque además suponen un ahorro de costes para el sistema sanitario. Un ejemplo de ello, sería el abordaje en cuanto a las relaciones adversas, porque requiere un tratamiento y este tiene un coste. Cuando se producen, un farmacéutico puede reaccionar con el conocimiento que tiene de la materia.
¿No se tienen claras o se desconocen las funciones que tienen los farmacéuticos más allá de la oficinas de farmacia?
Falta explotación de las habilidades de los farmacéuticos y de lo que nosotros podemos aportar al sistema sanitario. No tenemos acceso a muchas herramientas. Hay muchas iniciativas por parte del sector de la Farmacia pero no se toman decisiones por parte de las administraciones sanitarias competentes.
La pregunta del millón: ¿Por qué ha escogido Farmacia Hospitalaria y por qué el Hospital Gregorio Marañón?
He escogido Farmacia Hospitalaria pese a que a día de hoy es probable que no me pueda quedar en el hospital por la falta de plazas y entonces tenga que irme a la oficina de Farmacia, la Farmacia Comunitaria. Entiendo que tanto la Comunitaria como la Hospitalaria son complementarias y, por mi experiencia laboral, me gusta cómo es la labor de los farmacéuticos en los centros hospitalarios.
"El Hospital Gregorio Marañón es un referente en Farmacia Hospitalaria, es el mejor centro"
He optado por el Hospital Gregorio Marañón porque es referente en Farmacia Hospitalaria, es el mejor centro, aunque hay otros muy buenos como el 12 de Octubre de Madrid o La Fe de Valencia.
¿Está desesperanzado frente a su futuro profesional?
Me consta que los farmacéuticos adjuntos del Gregorio Marañón se esfuerzan en buscar un hueco a aquellos que han hecho la residencia allí. Pero si es cierto que las condiciones laborales de las bolsas de empleo, cubriendo bajas y demás, son muy poco estables.
¿Volvería a casa a retomar el negocio familiar?
Sí, no lo descartaría. Me encanta la Farmacia Hospitalaria, pese a que esté peor pagada, y si consigo una plaza en el hospital me quedaré. Pero tengo que ver cómo se desarrollo mi futuro más reciente a nivel profesional. Lo primero sería conseguir plaza y en caso de que no sea así ya iré viendo.