En octubre de 2023, el entonces ministro de Sanidad, José Miñones, aprobó una partida de 52 millones de euros procedentes de los Presupuestos Generales del Estado para, por primera vez en la historia de España, financiar el incremento de plazas de Medicina en las universidades públicas “para dar oportunidades a toda la gente”, señalaba entonces su predecesora, Carolina Darias, que fue quien puso en marcha la medida. La decisión tuvo ya en aquel momento muchas posturas en contra por parte de estudiantes y docentes, que ahora, con el nuevo incremento anunciado por Mónica García menos de un año después, han vuelto a alzar la voz.
“La justificación de apertura debe estudiarse en base a criterios demográficos, atendiendo especialmente a la capacidad docente del sistema de salud de cada comunidad autónoma, para evitar la masificación de los hospitales universitarios en detrimento de la calidad de la formación”, manifiesta a ConSalud.es desde el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM). Así, el aumento de plazas es de un 15% con respecto a las ofertadas por cada universidad, sin distinción entre ellas salvo que no dispongan de capacidad de real para llevar a cabo el incremento. De hecho, varias se acogieron a este recurso en la ocasión anterior.
“La justificación de apertura debe estudiarse en base a criterios demográficos, atendiendo especialmente a la capacidad docente del sistema de salud de cada comunidad autónoma"
Antonio Compañ Rosique es el decano de Medicina de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) y el vicepresidente de la Conferencia Nacional de Decanos y Decanas de Facultades de Medicina Españolas, otra de las organizaciones que más se ha quejado por la medida. “Es cierto que hacen faltan médicos en determinadas especialidades y regiones geográficas, pero debemos recordar que para poder ejercer la medicina en España se necesita poseer el título de especialista. Incrementar solo la admisión de estudiantes a nuestras facultades o incrementar el número de facultades de Medicina no solucionará por sí mismo el problema de las necesidades sino se incrementa la admisión al sistema de especialización”, apunta el decano, sacando a la palestra el otro gran problema que viene después: el MIR y las vacantes de la especialidad de Medicina de Familia que en 2024 han vuelto a quedar desiertas.
“Tenemos que tener una idea clara: no faltan médicos, faltan especialistas. Y eso no se soluciona con más estudiantes de Medicina, sino con las suficientes plazas de Formación Sanitaria Especializada y unas condiciones laborales dignas”, le apoyan desde CEEM. “Exigimos que el número de facultades de Medicina se ajuste al número de plazas MIR previstas para ofertar en seis años y que esta, a su vez, se ajuste a las necesidades reales del Sistema Nacional de Salud (SNS) sustentándose en estudios demográficos”, añaden los estudiantes de Medicina.
"Cuando los estudiantes que ahora empiezan terminen, quizás ya no haga falta tanto médico"
“Se conoce, a través de los propios estudios del Ministerio de Sanidad, que a partir del año 2027 la necesidad de médicos descenderá. Por lo que, teniendo en cuenta que la formación de un médico necesita unos once o doce años, cuando los estudiantes que ahora empiezan terminen, quizás ya no haga falta tanto médico”, insiste en ello Compañ Rosique, quien pide, para poder cumplir con las exigencias de aumento de plazas de Medicina del Gobierno sin dejar de lado la calidad de la formación, asegurar una mayor inversión infraestructura y recursos educativos, “incluyendo simuladores avanzados, tecnología y personal docente”.
“La masificación de las aulas amenaza la calidad de nuestra formación como futuros profesionales de salud, por no hablar del colapso de las prácticas hospitalarios. Por ley, no puede haber más de cinco profesionales con cada paciente, a no ser que las circunstancias lo requieran, y esto incluye personal médico y de enfermería, residentes y estudiantes. Por desgracia, este ratio no siempre se cumple, lo que vulnera el derecho a la intimidad del paciente y empeora la asistencia que recibe, además de suponer un perjuicio a nivel formativo para el estudiantado que lo vive”, reivindica el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina.
AUMENTAN TAMBIÉN LAS FACULTADES
Además, como han mencionado tanto Compañ Rosique como desde el CEEM , junto a este aumento de las plazas de nuevo ingreso en universidades públicas -922, casi un tercio más que las 626 aprobadas el año pasado- también están surgiendo nuevas facultades de Medicina en universidades tanto públicas como privadas de todo el territorio nacional: de 28 en 2009 hemos pasado a 53 en este curso 2024/2025 -gracias a las “incorporaciones” de la Universidad de Huelva y de la Universidad de Nebrija-, mientras que en el próximo 2025/2026 ya serán 56 las facultades de Medicina que hay en España. Esto nos convierte, desde hace ya un tiempo, en el país con mayor ratio de facultades por habitante, por delante de Corea del Sur.
“A más estudiantes se necesitan más profesores, es simple, y está costando mucho llenar las plantillas”
Pese a ello, casi todas las facultades de Medicina de nuestro país adolecen de falta de profesorado, uno de los retos “a muy corto plazo” al que deben hacer frente los decanos y que podría empeorar cuando se complete el último aumento: “A más estudiantes se necesitan más profesores, es simple, y está costando mucho llenar las plantillas”. “En caso de estricta necesidad de abrir una nueva facultad de Medicina, defendemos que sus plazas sean otorgadas a partir de una redistribución de carácter público a nivel estatal, de manera que el número total de estudiantes no aumente”, solicitan desde el CEEM.
“Denunciamos la falta de planificación de recursos y de coherencia nacional en base a recursos de ordenación profesional, haciendo visible la mala organización del sistema a nivel de las administraciones. Actualmente estamos pudiendo ver una migración de profesionales sanitarios a otros países europeos, buscando una mejor oferta en calidad laboral. Ello fomenta la creencia de la necesidad del aumento de plazas en las facultades de Medicina”, sentencian.