Cada vez son más las enfermeras que deciden, después de graduarse, no quedarse ancladas en un ámbito genérico de la profesión y optar por la vía de la especialización. La forma de conseguirlo de la manera más reglada, homogénea y práctica posible actualmente en España es a través del sistema de residencia, esto es, presentándose a las oposiciones de Enfermero Interno Residente (EIR) que el Ministerio de Sanidad convoca cada año. Para ello, es necesario prepararse un difícil examen de acceso que no cuenta con un temario específico, sino que abarca cualquier campo relacionado con la Enfermería sin ningún tipo de acotación.
Es por ello que la inmensa mayoría de las personas que se presentan al examen lo hacen a través de academias de preparación, las cuales, con años de experiencia a sus espaldas en este tema, saben cuáles son las materias que más suelen caer. Y en el caso de la prueba de este año, apuntan a ConSalud.es desde PlanEIR, la academia de Metrodora Education, esta estuvo nuevamente capitalizada -al igual que la de 2023- por cinco materias, que coparon el 40% del examen: Salud Mental, en el quinto lugar; Familiar y Comunitaria, en el cuarto; Obstetricia-Ginecología, en el tercero; Pediatría, en el segundo; y, en el primero, con 25 del total de 200 preguntas que componen la prueba EIR, es decir, más del 12%, Cardiología.
“Como esperábamos, el Ministerio ha incidido también en determinados temas con la intención de visibilizarlos"
“Como esperábamos, el Ministerio ha incidido también en determinados temas con la intención de visibilizarlos, como, por ejemplo, violencia de género, suicidio, eutanasia, gestación subrogada o terapia hormonal para el cambio de género”, explicaba Ana Rincón, directora de PlanEIR-Metrodora, después de analizar el examen de 2024 a las pocas horas de su finalización el pasado 20 de enero. Y se mostraba muy crítica con la composición de la prueba: “No ha permitido brillar al alumno, porque contenía muchas preguntas sobre las guías y estrategias que utiliza el Ministerio de Sanidad, y se centraba menos en los contenidos generales que una enfermera estudio para el ejercicio de su profesión”.
“Se trata de un examen complicado en el que incluso hay preguntas que no tienen realmente sentido a la hora de evaluar las competencias de una enfermera, como, por ejemplo, quién fue la primera persona en el mundo en tomar la tensión arterial”, insistía Ana Rincón, matizando que, con respecto a la convocatoria de 2023, “cuando varias de las preguntas suscitaron las bromas de los aspirantes a la salida”, las cuestiones planteadas por el grupo de expertos designado por el Ministerio de Sanidad habían mantenido una línea “más formal” este año.
"Cardiología fue la materia sorpresa en el examen EIR de 2024"
Cardiología fue así la “materia sorpresa” en el examen EIR de 2024, puesto que en el de 2023 ni tan siquiera aparecía dentro del ranking de las que más cayeron. Según PlanEIR-Metrodora, la primera fue entonces Familiar y Comunitaria, con 16 preguntas; Pediatría ocupó el segundo, con 15; Obstetricia-Ginecología el tercero, con 14; Salud Mental el cuarto, con 12; Paciente quirúrgico el quinto, con 11, las mismas que Geriatría; y Salud Laboral el sexto, con 4. Otros temas en aquella convocatoria del año pasado fueron, dentro de los médico quirúrgicos, la citada Cardiología, Aparato Digestivo, Neurología y Aparato Respiratorio; y, dentro de otros más generales, Investigación, Fundamentos de Enfermería, Administración y Legislación.
UN ÚLTIMO EXAMEN CARGADO DE POLÉMICA
Cabe recordar que el nombre de las materias que agrupan a cada pregunta de la prueba es el designado por los aspirantes, en este caso las academias, ya que, como se comentaba anteriormente, el Ministerio -como en prácticamente cualquier oposición- no ofrece ningún tipo de guía sobre lo que puede entrar y lo que no. De ahí las polémicas, no solo en el examen EIR, sino en cualquiera de los que componen la Formación Sanitaria Especializada: Medicina (MIR), Psicología (PIR), Farmacia (FIR), Biología (BIR), Química (QIR) y Física (RFIR).
“El año pasado ya fue muy difícil, lo que nos hacía pensar que se mantendría, pero finalmente incluso ha aumentado”
En el del EIR, sin embargo, la controversia fue especialmente acusada este año, hasta el punto de que, denunció la propia Ana Rincón en su momento a este periódico, se trató del más difícil en los 30 años de historia de la prueba. “Casi la mitad de las preguntas eran incontestables. Por ejemplo, planteaban quien fue la primera persona que midió la tensión arterial en el mundo”, aseguró la experta. “El año pasado ya fue muy difícil, lo que nos hacía pensar que se mantendría, pero finalmente incluso ha aumentado”, añadió. Más allá de los temas que puedan caer más o menos, lo que está claro es que hay que tener todo muy bien estudiado para garantizar el éxito en una prueba que requiere de un mínimo un año de preparación.
No obstante, por lógica, la mayoría de las preguntas corresponden a las materias que tienen aprobada especialidad EIR en España: Familiar y Comunitaria, la más numerosa con 891 plazas ofertadas en 2024; Obstétrico-Ginecológica, con 469 y la que siempre se agota antes; Salud Mental, con 330; Pediatría, con 246; Laboral, con 87; y Geriatría, con 85. “Queda claro que el tribunal quiere que los enfermeros generalistas, que se presentan a la especialidad, tengan muchos conocimientos consolidados antes de la residencia”, apunta Ana Rincón. Si todo sigue según lo previsto, la siguiente especialidad EIR en crearse podría ser Urgencias y Emergencias.