Tras la publicación de las notas definitivas del MIR , los aspirantes a una de las plazas de Médico Interno Residente tienen que establecer sus prioridades en cuanto a las especialidades donde formarse. Por ello, algunos compañeros que ya pasaron por esa experiencia han querido compartir las ventajas que tiene la rama que escogieron para animar a otros opositores a seguir ese camino.
Un residente de Pediatría compartió un hilo en Twitter en el que explicaba las ventajas de esta especialidad médica, aunque recuerda que también tiene sus propias técnicas. La formación dura 4 años, donde "el último (generalmente en la mayoría de sitios el último año entero) es de subespecialización". Asimismo, resalta que "se rota por todos lados (pero de niños): gastro, nefro, urgencias, neonatos, UCI’s…".
"Hacer Pediatría es como no elegir", afirma el residente, que continúa: "Lo único que eliges es ver bebotes y niños en lugar de adultos feos. Para los pediatras un niño de 14 años ya es todo un adulto, de hecho en algunos centros a partir de los 14 ya pasa adultos". "Odiamos los adultos, no nos interesan", concluye rotundamente.
"Hacer Pediatría es como no elegir. Lo único que eliges es ver bebotes y niños en lugar de adultos feos"
"A finales de R3 tienes que escoger cuál es tu subespecialidad, a la cual te dedicarás casi en exclusiva durante el R4", sin embargo, señala que hay hospitales que no dejan que sea todo el año, por ello recomienda que sea algo que se pregunte para poder discriminar entre un centro y otro. Y, aunque continúa diciendo que este tema daría para una larga explicación, detalla que no quiere decir que te vas a dedicar exclusivamente a la subespecialidad en la que te formes.
"La mayor oferta de trabajo se encuentra en Atención Primaria, donde, según el cupo de pacientes, puedes llegar a tener muchos al día con poco tiempo para cada uno, aunque no tanto como en adultos (bueno, en invierno sí).", por ello, insiste en que trabajo "siempre va a haber", aunque no de todas las subespecialidades ni en todos los lugares.
En Pediatría, donde las plazas suelen agotarse en torno al número 4.000, las guardias "en general son malas, salvo excepciones, se duerme poquito", incide el R2 aunque puntualiza que en lugares con población más envejecida y menos niños, "las guardias son mejores".
"En lugares con población más envejecida y menos niños, las guardias son mejores"
Respecto a en qué tipo de centro formarse, el residente explica que todos tienen "sus pros y sus contras": "Si tienes clara una subespecialidad y tienes claro que la Primaria no te gusta tanto, quizás te diría uno grande. Si prefieres primaria, uno pequeño. Pero ambos son muy válidos".
También insiste en que se trata de una especialidad "muy clínica". "Hacer cualquier prueba a un niño, incluso una analítica, se piensa 2 veces. Tienes que saber manejar la incertidumbre", desde su punto de vista esto es un "pro", ya que se consigue "mucho ojo clínico": "Un pediatra sabe qué hacer con un niño sólo mirándole la cara (literalmente)".
Uno de los avisos que tiene para los futuros residentes es que aprendan a manejar que el "80% de las consultas de urgencias son banales", pero que, sin embargo, "el niño que viene malo, viene malo de verdad". Y además, tienen que tener en cuenta que la relación con las familias es más estrecha que en cualquier otra especialidad y que se encontrarán con todo tipo de padres "excesivamente preocupados, pasotas y hasta negligentes".
La relación con las familias es más estrecha que en otras especialidades y encontrarán todo tipo de padres
Otra de las características es que en Pediatría se ve "toda la Medicina", ya que las patologías varían mucho con la edad: "Desde un gran prematuro de 25 semanas que no sabe ni respirar y con tensiones incompatibles con la vida a un adolescente de 15 años con un intento suicida". "Es completísima", resume el residente.
"¿Te gusta hacer cosas manuales? Endoscopias en gastro, cateterismos en cardio, fibrobroncoscopias en neumo, punciones lumbares a tutiplén en neonatos, biopsias de médula osea en Hemato-Oncología, intubaciones en UCI’s, vía de cordón umbilical en la neo…", enumera el autor del hilo. Antes de volver a poner el foco en los pacientes, "los mejores": "Le coges cariño hasta al crío de 10 meses que te llora desconsoladamente porque le dices ‘hola’. Se despiden felices cuando les das pegatinas, te dan abrazos, te mandan besitos, los bebotes te cogen el dedito, con los adolescentes te partes…"
Sin embargo, reconoce que es una especialidad que no mueve mucho dinero, ni tiene una privada potentísima pero, a cambio, califica el ambiente general como "muy bueno": "Vivir entre bebotes gorditos y crios hace todo mucho más ameno".
¿QUÉ PREGUNTAR EN EL HOSPITAL SI QUIERES HACER PEDIATRÍA?
El mismo residente en su hilo incluye un apartado sobre temas que considera importantes de consultar para decidirse por un destino donde formarse:
"- Si te dejan todo el año de R4 para tu subespecialidad
- Que se libren las guardias (obligatorio)
- Rotaciones externas si tiene carencias o si te permiten hacerlas voluntariamente para el R4
- Que tenga UCIP (Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos) y UCIN (Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales) es un pro importante
- Y ¡ve a verlo!"