En el MIR 2022, la última de las 23 plazas de Cirugía Pediátrica se agotó en el número de orden 4.609, mientras que se eligió por primera vez en el 546. Así, la media de números de orden que tuvieron los médicos que se decantaron por esta especialidad, fue de 2.124. Este año, el Ministerio de Sanidad ha convocado dos vacantes más, de forma que hay 25 plazas de Cirugía Pediátrica de las 8.550 plazas MIR ofertadas.
“Son pocas plazas en el cómputo global”, reconoce en ConSalud.es la presidenta de la Sociedad Española de Cirugía Pediátrica, la Dra. Marta de Diego Suárez. Con todo, es una especialidad “de pocos especialistas”, pues hay pocos centros acreditados.
El hecho de que haya pocas plazas, lleva a que sea de las primeras en agotarse, no solo por la propia idiosincrasia de la especialidad, sino porque la tasa de paro es prácticamente cero. Incluso hay dificultades en muchos servicios para cubrir sustituciones o plazas.
“LOS NIÑOS NO SON ADULTOS PEQUEÑOS”
En cuanto al día a día de los cirujanos pediátricos, las realidades son "muy diferentes” según el servicio, si bien todos los especialistas tienen consultas externas, quirófanos y guardias, que pueden ser localizadas o presenciales.
Aún así, las Urgencias son asumidas en muchas ocasiones por cirujanos generales debido al escaso número de especialistas. En este sentido, la Dra. De Diego se pregunta: “Aunque yo pueda operar a un adulto porque soy licenciada en Medicina y Cirugía, ¿tendría sentido que lo hiciera cuando soy cirujana pediátrica?”. La respuesta es que “lógicamente, no”.
“Si existe la especialidad, es porque los niños no son adultos pequeños, ni por su comportamiento global corporal ni por la reacción de sus tejidos ni por las técnicas quirúrgicas”
Es por ello que la presidenta de la SECP apuesta por realizar un estudio para conocer el número de especialistas actuales, las jubilaciones venideras y las necesidades poblaciones. Todo ello, con el objetivo de ajustar el número de profesionales y garantizar que todos los niños que ingresen en quirófano, sean atendidos por un cirujano pediátrico. Las hernias, la fimosis, los testículos no descendidos y los quistes, se alzan como las patologías más habituales que atienden los cirujanos pediátricos.
“Si existe la especialidad, es porque los niños no son adultos pequeños, ni por su comportamiento global corporal ni por la reacción de sus tejidos ni por las técnicas quirúrgicas”, insiste la cirujana pediátrica. Por ejemplo, aunque un cirujano general sepa operar una hernia de adultos, no se utiliza la misma técnica ni procedimiento en niños, explica la experta. “Existiendo la especialidad, hay que organizar el territorio para que los niños tengan un cirujano pediátrico si lo necesitan”.
“HAY QUE HABLAR CON SU LENGUAJE”
Y las diferencias entre adultos y niños no solo se quedan en lo meramente médico. También el manejo y atención al paciente varía. “El cirujano pediátrico tiene un feeling y una empatía diferente con los niños”, comenta la Dra. De Diego, que añade que el objetivo es que la vivencia quirúrgica durante la infancia “no sea una experiencia traumática”.
"El niño no es tonto y vive la angustia familiar. Tiene que saber a lo que va, decirle que tiene una pupa y hay que curarle"
Para conseguirlo, el primer paso es no engañarles ni mentirles sobre el procedimiento, sino explicárselo “con su lenguaje”. “El niño no es tonto y vive la angustia familiar. Tiene que saber a lo que va, decirle que tiene una pupa y hay que curarle. Contarle que vendrá, soplará un globo y se dormirá, porque así lo hacemos con la inducción anestésica para evitar punciones mientras estén despiertos”.
Y en bebés más pequeños, aunque no pueden explicarles qué va a pasar, también manejan la situación de forma diferente: “Les cogemos en brazos, les damos mimos antes de la cirugía… Tienes que adaptarte al paciente”.
Preguntada por un mensaje a los futuros médicos residentes, la Dra. De Diego lo tiene claro: “Cirugía Pediátrica es una especialidad muy completa y con muchas oportunidades para subespecializarse. Si te gusta la plasticidad de dominar diferentes territorios anatómicos y tienes una empatía especial con los niños y con la cirugía, es una especialidad preciosa”.