Cuando una persona sufre un accidente grave y tiene que ser trasladado al servicio de urgencias de un hospital, pasa por muchas manos, tanto para la atención inmediata que se le brinda como durante el proceso de rehabilitación posterior, lo que exige de una buena coordinación entre profesionales sanitarios. Por eso, cada vez son más las universidades españolas que unen a los estudiantes de sus distintos grados sanitarios para que trabajen conjuntamente y que la asistencia que brinden en el futuro sea la mejor posible.
Uno de los casos más extremos y únicos en nuestro país está en la Universitat de València (UV). Allí cuentan, desde el año de 2020, con un Centro de Simulación Interdisciplinar en Salud (CESIS-UV) que genera casos en los que participan, cada curso, más de 1.000 alumnos de casi todas sus titulaciones sanitarias: Medicina, Enfermería, Psicología, Fisioterapia, Farmacia, Odontología y Nutrición y Dietética. Muchos lo hacen de manera conjunta, aunque al final cada facultad los adapta de manera individual a las necesidades de sus estudiantes.
“Hicimos este enfoque teniendo en cuenta todas las situaciones de salud, no pensando primero en Medicina y Enfermería, que tienen ya trayectoria en simulación, y luego en el resto”
“Hicimos este enfoque teniendo en cuenta todas las situaciones de salud, no pensando primero en Medicina y Enfermería, que tienen ya trayectoria en simulación, y luego en el resto”, destaca a ConSalud.es Sofía Pérez Alenda, decana de Fisioterapia de la Universitat de València y coordinadora de CESIS-UV sobre un sistema que, asegura, los diferencia de otros centros de simulación que hay actualmente en España “tanto en hospitales como en las propias facultades”. “No es que Fisioterapia tenga un papel más importante. Simplemente es que entre los cinco decanos de las facultades que lo utilizamos acordamos designar a un representante por temas organizativos, pero contamos con la aprobación de todos”, matiza.
La simulación, al igual que la citada atención multidisciplinar al paciente, tampoco es algo nuevo. Pero también en este caso está cobrando cada vez más importancia, y lo que hace la UV con su innovador modelo es juntar ambos conceptos: “Nuestros alumnos tienen prácticas desde primer curso, en unos laboratorios con camillas en los que pueden practicar las técnicas de valoración y tratamiento, pero es algo más básico. En este nuevo centro, profesor y alumno tienen que actuar como si fuese una situación clínica real, con una metodología diferente”.
UN ÚNICO CASO PARA SIETE CARRERAS
A través de CESIS presentan casos muy específicos para cada titulación, como, pone de ejemplo la decana de Fisioterapia, un simulador de consulta al que acude una mujer embarazada que pide una técnica de masaje para tratar el suelo pélvico y favorecer el parto. Pero el aspecto que lo hace realmente diferente al resto de simuladores es esta conjunción de alumnos de las distintas carreras, que instauraron a medida que el simulador fue “rodando”.
“Generamos el caso de un paciente politraumatizado que había tenido un accidente en patinete, y lo fuimos complicando y adaptando poco a poco. Primero van los alumnos de sexto de Medicina y de cuarto de Enfermería, se les presenta el caso y hacen una simulación de la atención de urgencia dentro de una ambulancia. Una vez estabilizado, se lo llevan a urgencias, y en el simulador de hospital entran también juntos los estudiantes de Nutrición, Odontología y Farmacia. Les explicamos que el paciente tiene una fractura mandibular, que ha perdido piezas dentales, que hay que ajustarle la medicación y la alimentación…”, señala Pérez Alenda.
"Esto no es solo un hospital virtual, es toda una metodología de trabajo"
En último lugar, ya en fases posteriores, una vez que el paciente ha sido operado y ellos puestos en antecedentes, aparecen los alumnos de Psicología y de Fisioterapia. “No todos pueden ir el mismo día y a la misma sala, porque es inviable. En cada simulación hay entre doce y veinte estudiantes, depende del día, y se alternan entre los que participan activamente y los que visualizan, de manera que todos participan de alguna manera. Ha habido casos, como el del paciente politraumatizado, por el que pasan las siete titulaciones en distintos días de la semana”, destaca la decana de la Facultad de Fisioterapia de la Universitat de València.
Cada vez más asignaturas utilizan el CESIS, y desde la UV se esfuerzan por generar nuevos escenarios multidisciplinares. Recientemente han introducido un caso de rotura de cadera y de atención domiciliara, y este año han empezado a contar con actores de un grupo de teatro de personas con discapacidad, puesto que la fase de la simulación que corresponde a los futuros psicólogos y fisioterapeutas sí que han de hacerla con personas reales: “No basta solo con habilidades técnicas, como mover una pierna, sino que deben saber qué hacer si el paciente les dice que no se puede mover y que a él no lo tocan. O, si tienen a algún familiar alrededor que les está incordiando, generar un clima adecuado para poder hacer bien el abordaje”.
En Medicina incluso ya van a hacer en este 2025 sus pruebas ECOE (Examen Clínico Objetivo Estructurado), que tienen como objetivo evaluar el desempeño de los estudiantes ante situaciones clínicas específicas, en el simulador; y en la UV también tienen en mente que otras titulaciones sanitarias, como Podología, puedan empezar a utilizarlo. “Comunicación, relaciones interpersonales, trabajo en equipo… esto no es solo un hospital virtual, como el que hay en otras universidades. Es toda una metodología de trabajo”, insiste Pérez Alenda.