Urticaria por frío: qué es y cuáles son sus síntomas

Se trata de una afección en la piel que aparece principalmente en jóvenes y en niños cuando entran en contacto con el frío intenso, ya sea con el viento en la calle o al sumergir el brazo en agua fría

Urticaria (Foto. Freepik)
28 febrero 2022 | 11:00 h

Rojeces, inflamaciones y picores en la piel son algunas de las señales que pueden avisarnos de que estamos sufriendo una urticaria por frío. Las bajas temperaturas y el consumo de alimentos y bebidas heladas pueden provocar estas reacciones en las partes del cuerpo más expuestas y llegar a afectar a todo nuestro cuerpo.

Además, esta afección provocada por el frío puede estar relacionada con otros problemas. En este sentido, la doctora Ana Novalbos Wischer, especialista en Alergología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, explica cuáles son sus síntomas y sus tratamientos.

Según la experta, se trata de una afección en la piel que aparece principalmente en jóvenes y en niños cuando entran en contacto con el frío intenso, ya sea con el viento en la calle o al sumergir el brazo en agua fría. Las manos y la cara son las más afectadas por la urticaria, aunque podría llegar a extenderse si el paciente sufre una mayor reacción.

Se trata de una afección en la piel que aparece principalmente en jóvenes y en niños cuando entran en contacto con el frío intenso, ya sea con el viento en la calle o al sumergir el brazo en agua fría

Los síntomas que pueden presentarse son marcas rojas, picores, ronchas, así como inflamaciones. En situaciones más graves se pueden producir dolor en el abdomen, tragar y respirar con dificultades, mareos y pérdidas de conocimiento.

TIPOS DE URTICARIA POR FRÍO Y SUS CAUSAS

Se pueden diferenciar dos tipos de urticaria, por un lado, la primaria que es la más frecuente. Se desconoce su causa principal, pero parece estar relacionada con la toma de algunos medicamentos o con trastorno de la tiroides y otras enfermedades principalmente de tipo infeccioso que ha sufrido el paciente previamente, como la rubeola, la mononucleosis. En estos casos, los síntomas suelen desaparecer después de seis años.

Por otro, la secundaria; en los pacientes con esta urticaria se detectan inmunoglobulinas en la sangre que reaccionan con frío, y que parecen estar relacionadas con dolencias más graves. También hay un número de pacientes con antecedentes familiares que presentan los síntomas desde niños.

Hay que tener en cuenta que la urticaria por el frío puede estar relacionada con otros trastornos cutáneos, como urticaria por presión, urticaria colinérgica y dermografismo.

TEST DEL CUBITO DE HIELO COMO MÉTODO DE DIAGNÓSTICO

Se trata de un test de provocación del frío con el que se mide la reacción de la piel. Para esta prueba, se utiliza un cubito de hielo con el que tocamos el antebrazo del paciente durante cinco segundos. En los siguientes diez segundos, se deja descansar la zona apartando el cubito para, así, detectar las rojeces e inflamaciones que van surgiendo. Se repite tantas veces como sea necesario y la duración del test puede variar hasta averiguar la reacción concreta que sufre el paciente. En algunos casos se recomienda realizar otras pruebas complementarias, como el hemograma, para descartar otras afecciones.

En realidad, no se habla de tratamiento propiamente dicho, más allá de los típicos antihistamínicos, sino más bien de algunas precauciones que se pueden tomar para controlar los síntomas y evitarlos en la medida de lo posible. Por norma general la doctora aconseja la utilización de guantes y otras prendas que protejan del frío, no practicar deportes a bajas temperaturas, no consumir bebidas o alimentos fríos, evitar los baños con agua helada, en casos graves, uso de adrenalina o corticoides y en reacciones más leves, antihistamínicos.

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