¿Alguna vez has sentido miedo por someterte a una operación por no saber qué tipo de anestesia vas a tener, que efectos secundarios te podrá provocar o cuáles son sus riesgos? Todas las personas, hemos pasado alguna vez por un momento así.
La anestesia es un medicamento que se usa para prevenir el dolor durante una intervención quirúrgica, procedimientos dentales como empastes o extracción de dientes, durante pruebas sanitarias como colonoscopias o durante el parto. Pueden administrarse mediante inyección, inhalación, loción tópica, gotas para los ojos o parche cutáneo.
Existen tres tipos de anestesia: local, regional y general.
- Anestesia local: se utiliza para adormecer una pequeña parte del cuerpo donde se va a realizar la intervención. En la boca para realizar una extracción o alrededor de una herida que precise la costura de puntos. Normalmente se suele aplicar en forma de crema, loción, spray o inyección. En este tipo de anestesias, el paciente es consciente en todo momento de lo que está ocurriendo ya que está despierto.
Pueden administrarse mediante inyección, inhalación, loción tópica, gotas para los ojos o parche cutáneo.
- Anestesia regional: se utiliza para dormir áreas más grandes del cuerpo como pueden ser un brazo o una pierna. Esta técnica debe ser realiza exclusivamente por anestesiólogos y suele realizarse mediante una inyección cerca de los nervios que se encuentran en la región afectada. Uno de los usos más comunes de anestesia regional es para el parto, mediante la epidural, o la cesárea, ya que permite a la madre ser consciente en todo momento del nacimiento de su hijo.
- Anestesia general: afecta a todo el cuerpo. Se utiliza para realizar intervenciones quirúrgicas que durarán más tiempo de lo normal como operaciones a corazón abierto, operaciones cerebrales o trasplante de órganos. Con este tipo de analgésicos, el paciente queda completamente dormido e inconsciente.
RIESGOS DE LA ANESTESIA
Es normal sentir respeto y miedo al someterse a una operación donde sabes que tendrás que ser adormecido, sobre todo si se trata de una anestesia general. Miles de preguntas pueden recorrer la mente en busca de saber respuestas. En general, la anestesia es una forma de dormir el cuerpo segura, pero también puede presentar riesgos como: problemas respiratorios, reacción alérgica a la anestesia, arritmias, confusión una vez se ha despertado o retomar la conciencia durante la intervención