Todos, en algún momento de nuestra vida, hemos sufrido o sufriremos insomnio. Este trastorno caracterizado por la dificultad de conciliar el sueño, puede provocar cansancio, irritabilidad y falta de concentración.
''Son muchos los factores que hacen que puntualmente durmamos mal: una situación de estrés, un jet-lag tras un largo viaje transoceánico, un cambio de horario laboral… pero también un entorno inadecuado (por temperatura, luz o ruido, o por dormir en un lugar distinto al habitual), haber ingerido demasiado café o sustancias estimulantes, sufrir un dolor físico...'', señala la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
La exposición a la televisión antes de dormir también juega un papel fundamental e interfiere en nuestro sueño. Esta actividad suele ser inofensiva excepto cuando se realiza por un tiempo excesivo y especialmente con la luz apagada.
Este trastorno caracterizado por la dificultad de conciliar el sueño, puede provocar cansancio, irritabilidad y falta de concentración
''Cuando vemos televisión a oscuras nuestras pupilas se dilatan dejando que entre más luz y entonces el cerebro responde con más inquietud antes de ir a dormir. El resplandor de la pantalla, más los ruidos que el televisor emite hacen que el cerebro aumente su actividad eléctrica y las neuronas comiencen a acelerarse'', subraya el Instituto Europeo del Sueño.
Y es que, la tecnología durante la noche afecta nuestro sueño debido a la estimulación cognitiva que recibe el cerebro.
''Es importante hablar de nuestro reloj interno y su vínculo con la luz y la oscuridad. El reloj interno está controlado en gran medida por la hormona de la melatonina. Los receptores en nuestros ojos son sensibles a la luz azul y le indican al cerebro que es de día: hora de estar alerta y despertarse. Para que nuestra melatonina mantenga un ciclo saludable de sueño, los móviles y los portátiles, por ejemplo, solo deben usarse para una extensión muy limitada de una a dos horas antes de acostarse'', añade la doctora Verena Senn, neurobióloga y experta en sueño para la firma de colchones Emma.