El estrés es sin duda uno de los problemas mentales que más afecta a las personas. Las causas pueden ser muchas y muy diversas, desde los problemas en el trabajo, las cargas familiares, los problemas personales o la falta de ejercicio. Es importante saber cuándo se debe controlar el estrés para que no avance a otro tipo de problemas como la ansiedad.
A la hora de afrontar el estrés, el consejo más importante que se puede ofrecer es el de saber parar para relajarse, reflexionar sobre las causas de esa situación de estrés y serenarse para tomar decisiones o cambiar actitudes que permitan reducir el impacto del estrés. Se trata de aprender a controlarse y aprender a relajarse y para ello se pueden utilizar diferentes técnicas:
- Hacer ejercicio. La actividad física ayuda a liberar la tensión y a quemar la energía generada por el aumento de adrenalina, noradrenalina y cortisol que se genera con el estrés. Al finalizar, se obtendrá un estado de relajamiento que alejará las preocupaciones.
- Descansar suficientemente. Dormir nos ayuda a evadirnos de los problemas, pero sobre todo es importante mantener una buena higiene del sueño. Manteniendo condiciones como olvidarnos del móvil, tener todo al gusto: oscuridad, temperatura de la habitación…
- Cambiar las rutinas. Cuando se sufriendo un episodio de estrés lo mejor es cambiar las rutinas habituales y ayudar a desconectar.
- Comer saludablemente. Las comidas ligeras y sanas favorecen la reducción del estrés. Hay que comer sin prisas, masticando lentamente y evitando comidas copiosas, de difícil digestión y especiadas.
Hacer deporte, llevar una alimentación saludable, descansar lo suficiente o reír son algunos de los pasos que se pueden dar para combatir el estrés
- Un baño caliente. Permite relajarse y ayuda a eliminar la tensión muscular.
- Evitar aislarse. Cuando se está sólo se tiende a seguir analizando los detalles de la situación que produce el estrés, lo que no hace sino aumentarlo.
- Delegar. Esto es importante especialmente cuando las situaciones de estrés se producen en el ámbito de trabajo. Hay que aprender a trabajar en equipo y a delegar en otros compañeros. No se puede controlar absolutamente todo o asumir sólo toda la carga de trabajo. Una buena organización es también indispensable.
- Reir. La risa es una excelente terapia frente al estrés.
- Establecer prioridades. Hay que aprender a priorizar, relegando al último lugar aquellas cosas que estresan, toda vez que se han identificado como “tóxicas”.
¿CÓMO DETECTAR SI SUFRO ESTRÉS?
Tal y como explica Mayo Clinic, los principales síntomas que nos hacen evidenciar que estamos pasando por un episodio de estrés son algunos como el dolor de cabeza, la tensión o el dolor muscular, el dolor en el pecho, la fatiga, el malestar estomacal o los problemas para dormir.