La gingivitis es la infección de los tejidos periodontales, es decir, la inflamación alrededor del diente, más conocidas como encías. Si no se trata a tiempo, la gingivitis puede acabar degenerando en formas más serias de enfermedad periodontal, como la periodontitis o “piorrea”.
Las principales causas de la gingivitis son la acumulación de sarro y placa bacteriana por la mala higiene bucodental. Cuando no se limpian bien los dientes, las bacterias y el sarro pueden acabar invadiendo el tejido que rodea el diente, haciendo que se inflame y causando gingivitis. Otros factores que influyen en su aparición son:
- Cambios hormonales debido a la pubertad
- Diabetes no controlada
- Dientes mal alineados
- Uso de medicamentos como fenitoína, bismuto o algunas pastillas anticonceptivas.
SÍNTOMAS
Los odontólogos señalan que los principales síntomas de esta enfermedad son el sangrado de las encías, apariencia roja brillante en las encías, sensibilidad al tacto, úlceras bucales, inflamación y dolor en las encías. Además, esta patología es muy común durante los meses de embarazo, llegando a afectar a entre el 60 y 75 por ciento de las mujeres.
Las principales causas de la gingivitis son la acumulación de sarro y placa bacteriana por la mala higiene bucodental.
Según la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración, la importancia de un correcto diagnóstico de este tipo de lesión es muy importante, dado que se puede confundir fácilmente con otras patologías.
La gingivitis suele tratarse con una limpieza bucal en profundidad, que elimine la placa y el sarro causante del problema. Con el uso de una punta de ultrasonidos, un higienista dental eliminará todas las acumulaciones responsables de la inflamación.
En los casos donde la enfermedad este más avanzada, es necesario un tratamiento complementario con antibióticos y colutorios bucales, que eliminen hasta las bacterias más resistentes.