El flatoril tiene múltiples usos y sirve básicamente para tratar dolencias vinculadas con la salud gastroinstestinal. Las enfermedades o patologías más comunes que trata el Flatoril son aerofagia, colon, problemas con la digestión de alimentos, dispepsia flatulenta, meteorismo en las exploraciones radiológicas, molestias digestivas postoperatorias que cursan con flatulencia, así como trastornos gastrointestinales en personas nerviosas.
Los efectos secundarios del Flatoril normalmente son leves, transitorios y reversibles con la interrupción del tratamiento
Los efectos secundarios del Flatoril normalmente son leves, transitorios y reversibles con la interrupción del tratamiento. Las reacciones adversas más características son:
- Frecuentemente (10-25%): agitación, somnolencia, astenia, sedación.
- Ocasionalmente (1-9%): reacciones extrapiramidales: distonía aguda (especialmente en jóvenes y dosis diarias superiores a 20 mcg/kg), parkinsonismo, diskinesia tardía (especialmente con tratamientos prolongados en ancianos) y acatisia; mareos, náuseas, diarrea o estreñimiento.
- Raramente (<1%): ansiedad, insomnio, cefalea, hipertensión, mioclonía, hiperprolactinemia, galactorrea, amenorrea reversible, mastalgia y ginecomastia, metahemoglobinemia (en recién nacidos).
Según la ISMP-España, tomar Flatoril durante largos periodos de tiempo puede causar problemas y efectos extrapiramidales. Se han registrado varios casos de pacientes con parkinsonismo, tras la toma de estos medicamentos durante largos periodos de tiempos, más de un año. en todos los casos, se habían prescrito para trastornos digestivo inespecíficos y se mantenía de forma continuada, sin advertir el riesgo potencial que implica su administración prolongada.