Se trata, según recogen los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, de un defecto de nacimiento en la pared abdominal en el cual los intestinos del bebé salen del cuerpo a través de un orificio al lado del ombligo.
Esto ocurre cuando los músculos del abdomen no se forman correctamente al inicio de la gestación, creándose un orificio por el cual salen del cuerpo los intestinos e incluso otros órganos como el estómago o el hígado. Debido a que los intestinos no están recubiertos por un saco protector, al estar expuestos al líquido amniótico pueden irritarse, lo cual puede traducirse en que se acorten, retuerzan o hinchen.
LAS CAUSAS
Las causas de este defecto son desconocidas, si bien podría deberse a alteraciones genéticas o a determinados medicamentos y sustancias tóxicas durante el embarazo como el alcohol o el tabaco. Asimismo, el CDC recoge que las madres adolescentes presentan más probabilidades de tener un bebé con este defecto.
Existen dos tipos de gastrosquisis, en función de la gravedad y de si los pacientes presentan o no anomalías a nivel intestinal:
Gastrosquisis simple: el intestino sale fuera de la pared abdominal, sin anomalías
Gastrosquisis compleja: cuando el intestino que salió fuera está retorcido o presenta una malformación