La enfermedad de Crohn es un proceso inflamatorio crónico del tracto intestinal principalmente, aunque puede afectar cualquier parte del tracto digestivo desde la boca hasta el ano e incluso en ocasiones puede afectar otros órganos.
Según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), se presenta con mayor frecuencia en la parte final del intestino delgado (íleon) y el principio del intestino grueso (ileocecal). Puede aparecer en cualquier etapa de la vida, sobre todo en edades jóvenes, entre 15-35 años.
La Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) detalla que ''cursa con manifestaciones como dolor abdominal, diarrea, incontinencia fecal, sangrado rectal, pérdida de peso y fatiga. Junto a ellos, también síntomas extraintestinales que pueden comprometer la piel, las articulaciones, la vía biliar y los ojos''.
La enfermedad de Crohn es un proceso inflamatorio crónico del tracto intestinal principalmente
''También se presentan con frecuencia síntomas sistémicos como malestar general, pérdida de apetito, fiebre, eritema nodoso, el pioderma gangrenoso y la estomatitis aftosa. En los ojos se puede presentar una queilitis y epiescleritis; otras veces hay tumefacción de labio, párpados o la cara, y también pequeñas fisuras en las comisuras bucales, lo que llamamos queilitis angular. En la boca aparecen aftas'', especifica la SEMI.