La bursitis es un trastorno doloroso que afecta las pequeñas bolsas rellenas de líquido (bolsas sinoviales) que proporcionan amortiguación a los huesos, tendones y músculos alrededor de las articulaciones. La bursitis ocurre cuando estas bolsas se inflaman.
Las zonas en las que suele ocurrir este trastorno con mayor facilidad son el hombro, el codo y la cadera. Pero también ocurre alrededor de la rodilla, el talón y la base del dedo gordo del pie. La bursitis muchas veces aparece en articulaciones que realizan movimientos repetitivos de forma frecuente.
Tal y como señalan desde MayoClinic, los principales síntomas son los siguientes:
Doler o sentirse rígida
Doler más cuando la mueves o la presionas
Verse hinchada y enrojecida
¿Y cuál es el momento adecuado para consultar al médico? Cuando se empieza a tener un dolor incapacitante que no nos permite mover una articulación, cuando existe una hinchazón excesiva, un dolor intenso y punzante o fiebre, entonces es el momento apropiado para pedir ayuda a un profesional médico.
FACTORES DE RIESGO
Cualquier persona puede padecer bursitis, pero ciertos factores pueden aumentar el riesgo:
Edad. La bursitis se hace más frecuente con la edad.
Profesiones o pasatiempos. El riesgo de sufrir bursitis aumenta si tu trabajo o pasatiempo requiere movimientos repetidos o presión en una bolsa sinovial determinada. Algunos ejemplos son poner alfombras, instalar baldosas o azulejos, hacer tareas de jardinería, pintar y tocar un instrumento musical.
Otras afecciones. Ciertas enfermedades y trastornos generalizados, como la artritis reumatoide, la gota y la diabetes, aumentan el riesgo de padecer bursitis. Tener sobrepeso puede aumentar el riesgo de manifestar bursitis de cadera y rodilla.