La psoriasis es una enfermedad de la piel que causa manchas rojas y escamosas que pican, sobre todo en las rodillas, los codos, el tronco y el cuero cabelludo.
Es una enfermedad común y de larga duración (crónica) que no tiene cura. Tiende a tener ciclos, con brotes que duran semanas o meses y que luego disminuyen o incluso entran en remisión. Existen tratamientos para ayudar a controlar estos síntomas. Además, puedes incorporar hábitos de vida y estrategias de afrontamiento que te ayudarán a convivir mejor con la psoriasis.
''No es contagiosa y afecta principalmente a la piel y a las uñas y, con menor frecuencia, a las articulaciones (artritis psoriásica)'', subraya el doctor Miguel Sánchez Viera, dermatólogo del Instituto de Dermatología Integral.
''Como otras enfermedades inflamatorias crónicas (enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, etc.) se caracteriza porque el desarrollo de la enfermedad cursa con brotes, es decir, hay periodos de remisión que se alternan con un agudizamiento de los síntomas (brotes). Durante estos brotes, los pacientes experimentan una disminución de su calidad de vida, tanto por los síntomas propios de la enfermedad como por el rechazo que puede sufrir el paciente por parte de la población, que puede llegar a que este tenga una escasa vida social, problemas laborales e, incluso, problemas psicológicos (ansiedad o depresión)'', subraya la especialista.
La psoriasis es una enfermedad inflamatoria de carácter crónico que en España afecta en torno al 2-3% de la población
¿En quién es más frecuente? Las personas con antecedentes familiares de psoriasis tienen un mayor riesgo de padecerla. En cuanto a sexos, afecta por igual a hombres que a mujeres. Por su parte, hay dos edades en las que suele aparecer con mayor frecuencia: entre los 15 y los 30 años y entre los 50 y 60 años. Sin embargo, puede aparecer a cualquier edad, pero hasta un 75% de los casos la enfermedad debuta antes de los 40 años.
SÍNTOMAS Y CAUSAS
Según el dermatólogo, ''el principal síntoma son lesiones en la piel de color rojizo cubiertas de escamas blancas plateadas de diferente tamaño y grosor. Las escamas se deben a que estos pacientes tienen el periodo de recambio de la piel alterado y acelerado, de forma que se renueva cada 4-5 días en vez de los 30 días en los que las personas sanas van renovando las células epiteliales, las conocidas comúnmente como células muertas''. Las zonas más habituales donde se desarrollan son codos, rodillas, piernas, cuero cabelludo, uñas y la zona lumbar.
Aunque la aparición de placas de psoriasis es el síntoma más predominante, también puede aparecer en forma de pústulas, en forma de erupción roja en todo el cuerpo con desprendimiento de piel, de forma lisa, rojiza e inflamada en axilas, inglés y debajo del pecho, y en forma de gotas, más frecuente en niños a causa de una infección bacteriana.
Hay dos edades en las que suele aparecer con mayor frecuencia: entre los 15 y los 30 años y entre los 50 y 60 años
En cuanto a la causa de su aparición, ''se debe a múltiples factores, siendo la predisposición genética el principal motivo. Además, diferentes factores externos hacen que aparezcan o empeoren los síntomas, como pueden ser los traumatismos en las zonas afectadas anteriormente, infecciones, picaduras de insectos, consumo de alcohol y tabaco, e incluso, el estrés'', detalla Miguel Sánchez Viera.
TRATAMIENTO
Los tratamientos están encaminado tanto a paliar la sintomatología como a hacer que los brotes se espacien el mayor tiempo posible en el tiempo.
''Existen tratamientos vía tópica (cremas, pomadas, ungüentos, espumas o champús) para adaptarse a la extensión y zona afectada. Dependiendo de la gravedad de la lesión el dermatólogo pautará corticoides, derivados de la vitamina D, desescamentes (ácido salicílico o láctico), retinoides, o tratamientos tópicos con alquitrán de hulla o antralita'', explica el dermatólogo.
Asimismo, añade que ''los tratamientos vía oral o inyectables incluyen metrotexato, ciclosporina, retinoides y los llamados biológicos que actúan bloqueando o interrumpiendo la señal que produce la inflamación''.
''La fototerapia también es eficaz en el tratamiento de la psoriasis, de hecho, en verano los pacientes presentan una mejoría. En otras épicas de año se utilizan cabinas de fototerapia de uso médico y el láser excimer, que permite actuar únicamente en las zonas afectadas'', concluye Miguel Sánchez Viera.