Cada vez es más habitual que los deportistas incluyan en su rutina actividades como la natación, y esto se debe a que es uno de los deportes más completos y aptos para cualquier edad o condición.
Si te duele la espalda y quieres fortalecerla, si quieres perder peso y no te motiva nada ir al gimnasio o si sientes el cuerpo agarrotado por estar tantas horas delante del ordenador, son motivos suficientes para tirarte a la piscina y empezar a nadar.
Es importante destacar que la natación es también una herramienta muy útil para la autonomía de la persona en el medio acuático
Juan Vélez Reznak, licenciado en ciencias de la actividad física y del deporte, profesor de natación y fisioterapeuta del Centro Assari, destaca que la natación es una actividad física libre de impacto, por lo que no perjudica a las articulaciones y huesos. Al nadar, utilizamos la mayoría de los músculos del cuerpo e involucramos todas las articulaciones con movimientos globales y amplios. De esta manera, aumentamos la flexibilidad y elasticidad de todos ellos.
Asimismo, es importante destacar que la natación es también una herramienta muy útil para la autonomía de la persona en el medio acuático, ya que desarrolla habilidades como la flotación, la propulsión y la respiración.
Igualmente, como en toda práctica deportiva, activamos el metabolismo y quemamos un gran número de calorías. Por último, según Juan Vélez Reznak, un beneficio destacable de la natación, a diferencia de muchas actividades deportivas que se centran en una sola parte del cuerpo y de forma unilateral, es que es un trabajo global en el que involucramos por igual ambos lados del cuerpo: miembros inferiores y superiores.
Con respecto a los niños, la natación contribuye a su desarrollo motor y cognitivo, lo que la convierte en una herramienta educativa de primer nivel.