La colelitiasis o litiasis biliar, comúnmente conocida como piedras en la vesícula, es una de las enfermedades vesiculares más frecuentes. Consiste en la presencia de uno o varios cálculos en la vesícula, un pequeño órgano situado debajo del hígado que almacena la bilis, líquido que produce el hígado y que resulta esencial en la digestión de las grasas de los alimentos.
En cuanto a la sintomatología cabe destacar que no todos los pacientes presentan dolores o manifestaciones de la presencia de cálculos biliares y, en ocasiones, las piedras se descubren en exámenes rutinarios o en otras pruebas médicas de control.
Los cálculos biliares representan una de las principales enfermedades del aparato digestivo, con una prevalencia media-alta en nuestro país
Sin embargo, cuando los cálculos son más grandes sí suelen causar dolor, inflamación o cólicos. Incluso, en determinadas ocasiones la enfermedad puede presentarse de forma más severa y causar complicaciones que deriven en una colecistitis aguda, en una pancreatitis o una peritonitis biliar.
Los principales síntomas de la colelitiasis o litiasis biliar son:
- Cólico biliar: un dolor súbito e intenso que aparece en la parte derecha del abdomen y que puede irradiarse al hombro o al omoplato derechos
- Digestiones pesadas, náuseas y vómitos
- Fiebre y escalofríos
- Ictericia
El tratamiento variará en función del estado y la gravedad de la enfermedad y de los síntomas que presente el enfermo. Así, en pacientes con colelitiasis asintomática no será necesaria la cirugía y se optará por llevar a cabo un seguimiento exhaustivo para ver cómo avanza la enfermedad, mientras que en pacientes que presentan síntomas o complicaciones se optará por el tratamiento mediante medicamentos o por la cirugía.
En los casos en los que se detecta una litiasis vesicular se recomienda la extirpación quirúrgica de las piedras por cirugía laparoscópica o mínimamente invasiva.