Según recoge la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), el principal síntoma de las hemorroides es el dolor alrededor del ano y la aparición de sangre roja brillante en las heces, en el papel higiénico o goteando en el inodoro tras defecar. A menudo, se dilatan o inflaman a consecuencia del esfuerzo para evacuar el intestino, aunque pueden ser causadas por otros factores como el embarazo, el estreñimiento crónico, la diarrea o el envejecimiento.
Se ubican debajo de la piel que rodea el ano. Estos son algunos de los signos y síntomas posibles:
Picazón o irritación en la zona anal
Dolor o molestia
Hinchazón alrededor del ano
Sangrado
No siempre es posible evitarlas pues en algunas existen factores hereditarios. Pero, sí podemos corregir la obesidad, que favorece su aparición por aumento de la presión abdominal sobre el piso pélvico; o el estreñimiento que, al forzar el paso de las heces, comprime las venas hemorroidales; también la diarrea, que puede producir irritación local, u otros factores: ocupacionales, como estar de pie o sentado durante mucho tiempo seguido; embarazo, sobre todo en las últimas semanas; o la existencia de hipertensión portal. En ocasiones, también se relacionan con un abuso de laxantes o factores nutricionales que condicionan una dieta habitual sin residuos.
LA DIETA, CLAVE
También una dieta rica en fibra, ejercicios e higiene adecuada contribuyen a una evolución positiva. Además estos tratamientos siempre se deben completar con otros como laxantes suaves, analgésicos o tranquilizantes, así como otros que solucionen la isquemia o reducción de la circulación sanguínea en la zona afectada.