La dieta flexitariana es una dieta semi-vegetariana que basa su alimentación en el consumo de alimentos de procedencia vegetal. A diferencia de las dietas vegetarianas, en esta ocasión si está permitido el consumo de carnes y pescados.
Dentro de este tipo de dietas todos los alimentos están permitidos, pero se recomiendan consumir los siguientes: frutas, verduras, cereales integrales o derivados, legumbres, bebidas vegetales, condimentos vegetales y especias, algas y frutos secos.
Es una dieta semi-vegetariana que basa su alimentación en el consumo de alimentos de procedencia vegetal.
Según la Organización de Consumidores y usuarios (OCU), una dieta flexitariana debe de incluir a diario los siguientes nutrientes: 500 gramos de frutas y verduras. 100 gramos de proteínas vegetales como legumbres, soja o frutos secos. Cereales integrales y al menos una ración de lácteos.
BENEFICIOS DE LA DIETA FLEXITARIANA
Los expertos han señalado los múltiples beneficios que puede tener para la salud, el mantener una dieta flexitariana.
- Protege al sistema cardiovascular. Al ser una dieta basada en el consumo de frutas y verduras, se está protegiendo la salud del corazón, ya que controla la presión arterial y aumenta el colesterol bueno. No añaden demasiadas grasas y además aportan vitaminas, fibra, proteínas y minerales.
- Ayuda a bajar de peso. Al reducir el consumo de alimentos procesados y prefabricados se ayuda a bajar de peso. Muchas veces no se trata de prohibir alimentos, si no de cocinarlos y comerlos de la manera más apropiada.
- Previene la diabetes. Al incluir alimentos ricos en fibra, sin azúcar y bajos en grasa permiten un mejor control de la glucosa en sangre.
- Previene de muchas enfermedades. Está demostrado que llevar una alimentación saludable ayuda a prevenir muchas enfermedades, entre ellas el cáncer. Igualmente, también podría ayudar en el tratamiento de enfermedades inflamatorias como la enfermedad de Crohn.