Los métodos anticonceptivos no solo están destinados para evitar embarazos no deseados, sino que también forman parte de la prevención de las enfermedades de transmisión sexual (ETS). Tal y como destacan desde el Servicio Madrileño de Salud, ''no hay un método anticonceptivo perfecto ni 100% seguro, todos ofrecen ventajas e inconvenientes, pero los considerados eficaces brindan una protección anticonceptiva muy alta''.
''La gran mayoría son métodos para las mujeres, existiendo diversos tipos donde elegir, con diferentes mecanismos de actuación y vías de administración. Solo el preservativo masculino y la vasectomía son métodos para el hombre'', añaden.
En este sentido, elegir un tipo de anticonceptivo u otro dependerá de las necesidades y condiciones de cada persona, pero se deben tener en cuenta ciertos aspectos: la eficacia, la seguridad, la protección, la reversibilidad y la facilidad de uso.
No hay un método anticonceptivo perfecto ni 100% seguro, todos ofrecen ventajas e inconvenientes, pero los considerados eficaces brindan una protección anticonceptiva muy alta
Por ejemplo, ''solo los preservativos (masculino y femenino) ofrecen protección eficaz contra las ETS, incluido el VIH. Para mantener la misma protección frente a las ETS en las relaciones sexuales cuando se usa cualquier otro método anticonceptivo (natural, hormonal, intrauterino, quirúrgico u otros de barrera), es necesario utilizar simualtáneamente (al mismo tiempo) un preservativo'', subrayan desde el Servicio Madrileño de Salud.
TIPOS DE ANTICONCEPTIVOS
Dentro de los denominados ''métodos de barrera'', que impiden la entrada del esperma al útero, nos encontramos con: preservativo o condón masculino, preservativo o condón femenino, y el diafragma.
En el grupo de los métodos anticonceptivos hormonales, que impiden el proceso de concepción, se encuentran: anillo vaginal, parche anticonceptivo, minipíldora, inyección muscular de progestágeno, píldora combinada e implante subcutáneo.
También está el dispositivo intrauterino o DIU, un pequeño aparato que se coloca dentro del útero, y provoca un efecto espermicida y ovicida, es decir, destruye a los óvulos y espermatozoides.
Por último, en cuanto a los métodos permanentes y no reversibles, está la vasectomía y la ligadura de trompas.