El insomnio es un trastorno caracterizado por la dificultad de conciliar el sueño, que puede provocar cansancio, irritabilidad y falta de concentración.
La Sociedad Española del Sueño destaca tres tipos de insomnio: transitorio, cuya duración es inferior a una semana; de corta duración o agudo, cuya duración oscila entre una y cuatro semanas; y crónico, que dura cuatro semanas o más.
Aunque las causas del insomnio pueden ser de origen muy diverso, habitualmente son de tipo emocional, es decir, no dormimos debido a la ansiedad o a las preocupaciones.
CLAVES PARA DORMIR BIEN
Cada edad tiene unas necesidades de sueño diferentes. Mientras que los niños necesitan dormir entre 9-12 horas, los jóvenes y adultos necesitan entre 7-9 horas y las personas mayores, 6 horas o más.
El insomnio es un trastorno caracterizado por la dificultad de conciliar el sueño, que puede provocar cansancio, irritabilidad y falta de concentración
Para tener un sueño óptimo, lo recomendable es mantener un horario regular de sueño, es decir, acostarse y levantarse siempre a la misma hora.
El Ministerio de Sanidad, aconseja, antes de irse a dormir, evitar pensar en problemas o temas que te activen y te produzcan ansiedad, enfado, irritabilidad o malestar.
También es importante crear un entorno relajado para dormir; es decir, la habitación debe tener una temperatura agradable, sin ruidos y sin luz. Además, el colchón y la almohada deben ser cómodos.
Por otro lado, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid recomienda tener cuidado con las comidas copiosas antes de dormir, puesto que pueden dificultar la digestión. Igualmente, aunque se debe practicar ejercicio físico todos los días, hay que evitar hacerlo tres horas antes de dormir, para evitar tener un nivel de excitación difícil de compaginar con ponerse a dormir.
De igual forma, es necesario evitar las siestas largas, las sustancias excitantes y utilizar los dispositivos electrónicos.