En la caída del pelo influyen muchos factores como la mala alimentación, el estrés o en el caso de las mujeres los cambios hormonales, el estar embarazada o incluso la menopausia. Y también, la época del año en la que nos encontremos influye en su caída. Por ejemplo, durante el otoño, al igual que ocurre con las hojas de los arboles, el pelo suele caerse con más frecuencia o mejor dicho tiende a renovarse.
Para evitar su caída se pueden tomar muchas medidas y consejos como los que te ofrecemos a continuación.
Mantener una buena higiene capilar. La base para que el cabello no se caiga es usar os productos adecuados y lavarlo frecuentemente. Lo ideal es lavarlo cada 2-3 días, dependiendo de la suciedad que se tenga. Además, tampoco se recomiendan los hábitos como las mechas, el tinte o los tratamientos capilares para rizar o alisar el pelo.
No aclarar el pelo con agua caliente. Sabemos que es algo complicado, sobre todo durante el invierno, pero sin embargo lo mejor por la salud de nuestro pelo es utilizar agua fría o templada.
Seguir una dieta equilibrada. La alimentación influye de manera muy significativa en la caída del pelo. Lo mejor es seguir una dieta en la que se obtengan todos los nutrientes necesarios y donde haya variedad de frutas y verduras.
Cepillar el pelo con peines de dientes anchos. Si no queremos que nos tire el pelo lo mejor es usar también un acondicionador para evitar sus enredos.
Corta las puntas frecuentemente. Además de ayudar a que nuestro pelo crezca más fuerte, también es una excelente manera de prevenir la caída del cabello. Cuando las puntas están en mal estado eso hace que se abran y se partan por la mitad llegan a provocar su rotura y caída.
Masajes en el cuero cabelludo. Además de ser relajantes, nos pueden ayudar a evitar la caída del cabello.