La bronquiolitis es una infección de tipo viral de las vías respiratorias más pequeñas (bronquiolos) que afecta a niños de hasta dos años. La infección puede aparecer en cualquier época del año, aunque lo más frecuente es que aparezca en los meses de invierno y al comienzo de la primavera.
Según el Hospital Quirónsalud del Vallés, el origen suele ser viral. El principal agente infeccioso responsable de la enfermedad es el Virus Respiratorio Sincitial (VRS), pero también puede haber otros gérmenes implicados en la infección.
Los antibióticos no son útiles para tratar la bronquiolitis, porque es causada por una infección viral y únicamente son efectivos en las infecciones bacterianas
''La bronquiolitis se inicia con un catarro (estornudos, mocos transparentes) y, algunas veces fiebre y conjuntivitis. Después de uno o dos días, aparecen crisis de tos, respiración más rápida, ruidos, se nota que se hunden las costillas, y va empeorando hasta presentar dificultad para alimentarse y para dormir'', añaden desde el Hospital Quirónsalud del Vallés.
El diagnóstico de la bronquiolitis es fundamentalmente clínico, basado en la anamnesis y en la exploración física. Las pruebas complementarias no suelen ser necesarias salvo en situaciones muy concretas, tal y como explican desde la Asociación Española de Pediatría (Aeped).
En cuanto al tratamiento, según detallan desde Sanidad de la Comunidad de Madrid, ''la mayoría de los médicos están de acuerdo en que las medidas generales de soporte son las únicas medidas terapéuticas que han demostrado científicamente su utilidad. Los antibióticos no son útiles para tratar la bronquiolitis, porque es causada por una infección viral y únicamente son efectivos en las infecciones bacterianas''.
Así, se recomienda descansar, tomar muchos líquidos, realizar lavados nasales o tomar aspirina (si se es adulto) o acetaminofén para bajar la fiebre.