Son seguramente una de las frutas que más se consumen en España cuando se acerca la primavera y el verano. Las cerezas se caracterizan por ser carnosas, dulces y refrescantes, además, a todo el mundo le gusta. El origen de esta fruta se sitúa en el Mar Negro y en el Mar Caspio, llegando después a Europa y Asia, por medio de las aves y las migraciones humanas.
Existen tres variedades diferentes: dulces, ácidas o guindas y duke, que es un hibrido entre las dulces y las ácidas.
Tal y como explica la Fundación Española de la Nutrición (FEN), la cereza es una fruta rica en hidratos de carbono, principalmente azucares como la fructosa, glucosa y la sacarosa. Su valor calórico es moderado respecto al de otras frutas. Aporta cantidades considerables de fibra, que mejora el tránsito intestinal.
La cereza es una fruta rica en hidratos de carbono, principalmente azucares como la fructosa, glucosa y la sacarosa
En cuanto a su contenido en vitaminas, están presentes las vitamina C, tiamina, folatos y provitamina A. Tiene cantidades importantes de potasio y en menor proporción, magnesio, hierro, fósforo y calcio, este último de peor aprovechamiento que el que procede de los lácteos u otros alimentos que son buena fuente de dicho mineral.
Como podemos ver, se trata de una fruta muy completa que además aporta numerosos beneficios para la salud.
- Ayudan a eliminar toxinas. Sus propiedades depurativas ayudan a regular el tránsito intestinal y a eliminar las toxinas gracias a que los pigmentos que les dan color son las antocianinas.
- Ayudan a mejorar la memoria. La Asociación Americana contra el Alzheimer incluye las cerezas como parte de los alimentos beneficiosos para la memoria gracias a sus antioxidantes.
- Son ricas en quercetina. Se trata de un flavonoide natural que se asocia con fuertes propiedades antioxidantes. Ayuda a neutralizar el daño causado por los radicales libres y protegen al organismo de contraer enfermedades del corazón, cáncer de mama, colon, próstata y pulmón. Además tienen efectos antiinflamatorios y antihistamínicos.
- Alivia el dolor de las articulaciones. Ayudan a reducir los dolores de diferentes enfermedades relacionadas con las articulaciones como la artritis o la gota.
- Ayudan a estabilizar los niveles de azúcar en sangre. Se trata de una fruta que tiene los valores de índice glucémico más bajos.