La berenjena es un alimento muy versátil e ideal para aquellas personas que deban vigilar su peso. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), su valor energético y nutritivo es pequeño comparado con el de otras verduras y hortalizas, siendo el componente mayoritario en su peso el agua.
Es de contenido fibroso medio, pero más localizado en piel y semillas. La piel de la berenjena contiene una antocianina, la nasunina, con acción antioxidante.
La berenjena es un alimento muy versátil e ideal para aquellas personas que deban vigilar su peso
Además, la berenjena contiene cierta cantidad de un alcaloide tóxico llamado solanina, que aparece mucho más en las partes verdes de la planta y en los frutos poco maduros. La solanina desaparece con el calor, de modo que una berenjena madura bien preparada y cocinada no supone el más mínimo riesgo.
Todas estas propiedades hacen que le berenjena sea perfecta para combatir el insomnio, prevenir la aterosclerosis y mantener un buen tránsito intestinal gracias a su aporte de fibra soluble.
Asimismo, protege el hígado y se recomienda en personas con problemas de hipertensión por su bajo contenido en sodio. Igualmente, su piel y semillas contienen sustancias químicas que contribuyen a mantener el colesterol en niveles óptimos, inhibiendo su síntesis en el hígado y evitando que se oxide y adhiera a las paredes arteriales.
Por otro lado, ayuda a reducir la presión arterial, es buena para el sistema nervioso y ayuda a controlar el azúcar.