Los estudios publicados sobre el cardo mariano han revelado su mecanismo de acción y eficacia. Y es que, el fruto de esta planta contiene tres activos (silibina, silcristina y silidianina) que forman un complejo hepaprotector conocido como silimarina.
El cardo mariano puede aportar muchos beneficios para tratar problemas de salud. Su uso más común es para problemas hepáticos pero algunas personas afirman que también puede ayudar a enfermedades como la cirrosis, la ictericia, la hepatitis, así como a los trastornos de la vesícula biliar. También puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y ayudar a las personas a controlar la diabetes tipo 2.
Además de estos, te mostramos otros de los grandes beneficios que aporta este fruto.
1. PROMUEVE LA SALUD DE LA PIEL
El cardo mariano puede ayudar a promover una piel saludable. Según un estudio publicado en 2015, el cardo mariano ayudó a mejorar las condiciones inflamatorias de la piel cuando se aplica a la piel de los ratones. También se descubrió que este fruto tiene efectos antioxidantes y antiedad sobre las células de la piel.
2. PÉRDIDA DE PESO
La silimarina puede ser beneficiosa para aquellos que quieren perder peso. Sin embargo, aún se necesitan más estudios sobre los efectos que tiene el cardo mariano sobre la pérdida de peso.
3. MEJORA LOS SÍNTOMAS DE ASMA
El ingrediente activo en el cardo mariano puede ayudar a reducir la inflamación. Según los últimos estudios, la silimarina puede ayudar a proteger de la inflamación en las vías respiratorias. No obstante, como ocurre con los beneficios para perder peso, se necesitan más estudios en humanos.
4. LIMITA LA PROPAGACIÓN DEL CÁNCER
El cardo mariano puede ayudar a detener la propagación de ciertos tipos de cáncer. Un estudio de 2016 reveló que el extracto de cardo de leche inhibió el crecimiento de células cancerosas en el cáncer colorrectal.
5. SALUD ÓSEA
El cardo mariano puede jugar ayudar a prevenir la pérdida ósea.
Además, este fruto es esencial cuando vamos a excedernos con la dieta, bien con alimentos ricos en grasa o difíciles de digerir y alcochol. Las comidas y cenas copiosas, las cañas con los amigos y los picoteos varios, las salidas extra para comer y cenar fuera de casa… todo eso castiga nuestro hígado.