La algarroba se ha convertido en un producto estrella en el mundo de la repostería. En España se cultiva principalmente en Valencia, Castellón, Tarragona, así como Baleares. También en Alicante, Murcia y Málaga. Sobre todo se utiliza como un sustituto del cacao y el azúcar.
Existen múltiples variedades de algarroba. Según el tipo, la algarroba varía en tamaño, dulzura y color, aunque las más conocidas son las siguientes: negreta, melar o melera, caches, rojal, costella o de la canal, durayó o duraiona y castellana.
BENEFICIOS
Las propiedades del algarrobo, varían dependiendo del tipo de que se trate. Aún así, todos tienen en comun que se trata de un alimento rico en azúcares, principalmente sacarosa y en menor de glucosa y maltosa.
Además, es un buen sustituto de las harinas clasicas, por lo que se convierte en un alimento ideal para las personas intolerantes al gluten.
Estos son algunos de sus principales beneficios:
- Previene el cáncer. Gracias al gran contenido que tiene en D-pinitol, destaca por sus propiedades anticancerigenas y antienvejecimiento.
- Regula el azúcar y la diabetes. Como deciamos, se trata de un alimento que es capaz de eliminar y evitar las concentraciones de azúcar en sangre, siendo fundamental para las personas con diabetes.
- Eficaz contra el estreñimiento. Gracias a su alto contenido en fibra y azúcares puede aumentar el tránsito intestinal aliviando el estreñimiento.
- Ayuda a mantener el colesterol. La fibra de la vaina de algarroba puede reducir los niveles de colesterol LDL, el cual resulta perjudicial para la salud cardiovascular.