Cuando un ingrediente cosmético se pone de moda, oímos hablar de él constantemente. Puede ser muy desconocido o algo tan básico, que llevamos tiempo utilizándolo, bien sea en nuestras rutinas cosméticas, en nuestra cocina o en nuestro día a día. Eso ha pasado con el agua de arroz, el nuevo ''must have'' de nuestra rutina capilar. Pero, ¿por qué las expertas en belleza se han hecho eco de este ingrediente?
Desde la antigüedad, las mujeres asiáticas han empleado el tratamiento de agua de arroz para el pelo, con la intención de mantenerlo largo y sano. El agua de arroz contiene un hidrato de carbono, el inositol, con una potente acción reparadora sobre el pelo especialmente dañado y estropeado, devolviéndole la elasticidad y la suavidad al instante y haciéndolo resistente al quiebre, la fricción y el daño.
Además, es un remedio eficaz para el encrespamiento y para añadir brillo a tu melena, porque el arroz contiene una alta concentración de aminoácidos, proteínas, vitaminas, minerales y antioxidantes. Se trata de un activo natural muy suave que resulta ideal para las personas con el cuero cabelludo sensible.
Desde la antigüedad, las mujeres asiáticas han empleado el tratamiento de agua de arroz para el pelo, con la intención de mantenerlo largo y sano
Este cereal, a su vez, tiene gran poder hidratante y aumenta la capacidad del cabello para retener agua, por lo que proporciona un efecto voluminizador, ya que el cabello se llena de agua y adquiere más cuerpo. La proteína de arroz también deposita una película sobre la cutícula del cabello haciendo que se desenrede y se peine más fácilmente.
Por eso, Batiste tiene una fórmula profesional a base de almidón de arroz (sin agua) que es el secreto de su éxito para espaciar los lavados y dejar el pelo con brillo, suavidad, sedosidad.
El almidón de arroz actúa sobre el exceso de grasa eliminándola desde las raíces y, además, aporta un extra de volumen, elimina el apelmazamiento y otorga movimiento.
La gama Fragancias de Batiste desprende, asimismo, un aroma agradable en todo momento, bien sea recién levantadas, tras una tarde de batch cooking, al terminar una clase del gym o después de una larga jornada fuera de casa.
La fórmula Batiste mantiene el cabello con aspecto limpio y fresco en cualquier situación, prolongando el tiempo entre lavados y dotando al cabello del brillo y del aspecto sano que se merece, sin necesidad de utilizar agua ni secador. Basta con rociarlo, hacer un suave masaje y listo.
Además, no hay que verlo solo como un producto S.O.S, sino que también funciona como texturizador y aporta volumen a tu melena. Hay un Batiste para cada necesidad, dependiendo del tipo de aroma que te guste, el color, el formato o la funcionalidad.